Zapatillas Rotas

Pisadas constantes.
Transitar en la vida.
Zapatillas rotas por el tiempo,
que no perdona.
Si te acabas tú, si me acabo yo…
Ya están abandonadas, perdieron el uso.
Zapatillas que un día sirvieron,
para que no pisaras el camino quebradizo.
Andabas como en las nubes.
Sólo ellas soportaron las duras tempestades, en los duros suelos.
Y sólo quedan de ellas el rezago acumulado, de pisadas duras, fuertes, tormentosas, que a veces en la vida nos toca.