Reina mía

Masoquista, reina mía
diosa de sabiduría,
es un pesar que esta lengua
no tenga la valentía
que tiene el cobarde de
expresar lo que no siente,
cobardía al no decirte
lo que mi corazón siente,
mis más sinceras disculpas
por herirte desde dentro.

Lo que duele es tu lamento
notar la forma en que escurren
las gotas de lluvia en tu alma,
tus días se tornan grises
mientras los míos no llegan
como un espejo reflejas
la forma en la que está formado
mi simple corazón humano
fría pero no me engañas
no escondes bien la dulzura
que escondes tras tu mirada
mis ojos gritan silenciosos
un "Te amo" cuando me alejo
y yaces cubierta en llanto
pero no llores mamá
porque te amo tanto, tanto.