Para Anne Sexton.

poema de Erasmo

¡Loca!,
rara y seducida
por el abismo secreto.

¡Loca!,
yo te quiero en mi propia demencia,
y hasta te comprendo,
con mirarte en tu retrato amarillento,
vieja foto agrietada y nueva.

Mía,
porque así te amo,
a pesar de discutirte,
de desquiciado a enferma,
de enfermo a desquiciada,
para arribar al mismo sitio.

No hay confines,
solamente nuestros.