La verdadera historia de Rodrigo Lira.

poema de Erasmo

Hay una historia oficial,
pero esa no interesa,
la que aquí voy a contar se ajusta a la mentira,
o a sutil fantasía
del juglar en cuestión.

Fue caracola silente,
ave de paso,
canto silvestre,
un huracán comedido,
una ranura,
una palabra descalza.

Fue colibrí despeinado,
hasta oración de noviembre,
digitación de los hados,
cabalgata iluminada,
mago del verbo y gorrión asustado.

Trazó su nombre de lado,
allí en el margen de todos,
y trajinó en el planeta,
cual esencia de mosqueta.

Dijo llamarse "Rodrigo",
yo no supiese su nombre.