Porqué y para qué escribo

Escribo porque es la mejor manera de encontrarme con mi subconsciente, yendo más allá de la realidad limitante que no me permite expresarme de manera absoluta, pudiendo mostrarme como realmente soy.
Escribo porque me libero de las ataduras y prejuicios psicológicos que deseo atacar con franqueza para sentirme aliviado y pleno.
Escribo porque deseo compartir mis ideas y puntos de vista con personas que valoren mi aporte intelectual.
Escribo porque me gusta incrementar mi capacidad mnemotécnica al usar mi memoria para mantenerla intacta y prolífica, creando ideas y rememorando lo que conozco.
Escribo porque me contagio de adrenalina y la mejor energía mientras creo cosas inéditas, las cuales no pensaría poder lograr en un estado diferente de conciencia al que me permite lograr la escritura.
Escribo porque logro encontrarme con mi auténtico “yo”, sin restricciones ni obstáculos que me inhiban de sentir o decir lo que pienso.
Escribo porque encuentro respuestas ocultas a interrogantes que alguna vez me hice o me haré.
Escribo, porque al hacerlo también ejercito de manera pródiga mi argumentación y capacidad oratoria, pudiendo hablar de modo convincente y magistral.
Escribo, para que me recuerden siempre por lo que nunca me atreví a decir, pero al final sí lo dije de algún modo.
Escribo para ser un hombre original y autónomo, quien desea estampar su propio sello distintivo de modo intachable e inimitable.
Escribo para viajar en el tiempo, retomando mi infancia nostálgica y visualizar un próspero futuro que forzaré a llegar.
Escribo para expresar las ideas de la gente que no es capaz de cristalizarlas con lápiz y papel, pero al leer mis versos logren identificarse con su propia percepción de la vida.
Escribo para nunca sentirme solo o abandonado ante las adversidades o penurias de la vida.
Escribo para evadir depresiones y conductas mórbidas que escatiman mi capacidad intelectual.
Escribo, porque cuando compongo una gran melodía deseo que lleve la letra más memorable, convirtiéndola en una obra maestra impecable.
Escribo porque las palabras producen eco y se las lleva el viento, mientras lo escrito permanece y prevalece.
Escribo porque el día de mañana moriré, y cuando renazca o reencarne podré retroalimentarme de lo que alguna vez dejé sembrado en otras personas que aún vivan y conserven mis aportes escritos.
Escribo para resaltar el valor de las cosas que nadie estima en la actualidad.
Escribo para criticar la iniquidad o injusticia extrema de la humanidad.
Escribo para exhortar y convencer a las personas sobre la realidad desconocida o ignorada de las cosas.
Escribo para defender la estética de todo lo que existe.
Escribo para repasar diariamente mis propósitos y nunca desenfocarme de ellos.
Escribo para planear mi presente y futuro.
Escribo para divertir y enseñar a mis lectores.
Escribo para evolucionar diariamente y saber algo más de todo.
Escribo para mostrar las cosas como nadie se atreve a exponerlas, creando revolución y novedad.
Escribo para mejorar mi lenguaje y ortografía.