Comenze a escribir algo

He despertado bruscamente, trato de relajar mi respiración y mis latidos.
     Valla trabajó difícil después de salir de tan extraña pesadilla, y aún más,  cuando este llega a mi, por segunda vez.
     Cuando miró el reloj ya son las tres con treinta am, pero no quiero dormir otra vez.
     En el sueño caminaba descalzo, no sobre asfalto, si no, sobre los adoquines de una amplia calle, no había aspecto moderno en las tiendas que la bordeaban.
     Despues de al menos diez minutos de camino,  la calle me condujo al centro del extraño lugar, lo cual deduje, pues allí daban convergencia otras cuatro calles de aspecto similar, y el punto central era coronado por lo que daba aspecto de un estanque, y en el centro sobre un pedestal, la estatua de lo que parecía un hombre a caballo y con arco armado, pareciera estar por disparar, pero que raro, sin una flecha en el.
     Me acercaba al estanque, y por un momento creí ver destellos verdes, y de hecho así era, los ojos de ambas figuras tenían ese destello, que n aumento parecía darles vida...
     El relincho espectral del caballo, heló cada centímetro de mi cuerpo, me sentía con más peso,