(Mujeres)

Somos invitados de primera fila,
Espectadores del cielo y el infierno,
Arbusto bajo el mal y buen clima,
Somos el recipiente de sus miedos y de su beso mas tierno

Son ellas las que dan credencial de lo divino,
Y le dan esa paz a mis labios resecos por la soledad,
Aun más cálida que el sabor del mejor vino,
Creadoras de lo increíble, y traficantes de la bondad

Culpables de la poesía, la pintura y hasta el alcohol,
Son ellas las creadoras de la palabra tentación,
Son la belleza en cada verso y oración
Y han sido ellas las culpables de mi único dolor

Son parte de nuestra historia mundial y también personal.
Las de ojos de gata y legua de serpiente,
Por ellas no hay nada que pueda ser banal
Solo espero al final de sus curvas ser sobreviviente

Somos solo exploradores en sus mentes,
Ahí donde se crea la hermosura del infinito universo,
Las hay calladas, misteriosas y hasta dementes,
Y son el alma de este y el siguiente verso

Defensoras de la moral y amantes de la verdad,
Gaviotas surcando el mar en el horizonte de lo sublime,
Tan inofensivas como bestia salvaje y peligrosa como la bondad,
¿Qué haríamos sin ellas? Solo dime

Amándoles cavamos la propia fosa,
Pero es que si no fuera por las reinas de la incertidumbre,
No creo que pueda escribir sobre otra cosa,
Son mi risa, mis lamentos, mi alcohol, mi droga y hasta mi costumbre

Es que si no existieran, lo único que el hombre hiciera,
Seria adorar a la política y enamorar a sus billetes,
Les llevaríamos rosas a lo primero que se viera,
Y ni siquiera comprenderíamos nuestras mentes

Son nuestra cruz y clavos,
Pero también nuestro escape de la realidad,
Las de besos con sal y miradas de miel,
Son simplemente la verdad

Les debemos todo y nada,
Más de lo que podemos pagar.