Una vida

poema de Krieger

Si ahí en esa casa está todo,
pero al mismo tiempo igual no queda nada, la vida pasó a otro foro,
esperando la brisa del mañana.

La muerte libera el espacio que existe adentro,
y solo queda mirar desde afuera para recordar las longevas imagenes.

Longevas pero hermosas,
ellas que tanto te dieron,
tanta emoción, tanta tristeza,
tanta felicidad...

Sin embargo, desde adentro
se ve todo distinto,
ya no ves esas imágenes,
no están.

Solo estás tu, sintiendo tu propia respiración, absorbiendo los polvos del día anterior y soportando enfermarte de nuevo en un desierto en el que ya no verás más el sol.

Se tornará de azul marino el cielo y verás un mar en lo alto, elevandote a la profundidad, como la noche de aquel asalto.

Retrocedes en el tiempo y te duele,
no aguantas, no te perdonas haber dejado solas a tus dos pequeñas, que por culpa de un imbécil ahora solo te sueñan.