Gris numen

Entre un “yo te…”
Y un “…amo”
Brotan ahítas margaritas
Entre mis dedos
En la canícula
Del corazón impune
Violáceos sedimentos
Grajean tácitos
Y tu risa silba
Ceremoniosa
Desde un lunes oscuro
Hasta un martes de tinieblas
Esperando lo inacabado
Una mentira menos.
Por delante corretean
Las ventiscas del pasado
Amasadas tras el tragaluz
Bordeando, mí sombra henchida
Panza arriba… a borbotones
Las notas del alma acarician níveas
La cebada corpuscular
Que indolente se marchita,
Se derrama y se derrite
Ventana abajo
Sin tocar el suelo
Tan lejos…
Es otoño
Pero el Sol irradia
En la libertad de tus gestos
Clamando infame
No se mueran todavía
Los secretos insinuados
…conóceme…
Pasión inmóvil
Un grito sereno, devastador
Unos pardos abrazos
Unos fulgores carnosos
De la simiente del deleite
Se desgarra toda forma
Pues solo el amor
En la reducción
A la que te sometes
Siendo la sierpe
Y yo su piel olvidada
Joven criolla del tártaro
Solo el amor
Te basta…
Solo
Tras el beso de obsidiana fulminante
Se esconde la madre
Agasajada con su desnudo broncíneo
Tus colmillos lloran
Porque nadie ha escrito esto
Nadie, excepto yo.