Mi primer amor

¿Cómo no iba a ahogarme en mis lágrimas?
¿Cómo no iba a buscarte desesperadamente para que vuelvas?
¿Cómo no iba a sentir la tristeza y soledad por todo mi cuerpo, cuando desapareciste?

Si fuiste mi primer amor

Si te llevaste mi inocencia, mi infancia, mi adolescencia, mi entusiasmo al querer, mis ganas de creer, a ciegas

Si la primera vez que te contemplé, eras más que magia, más que ensueño, más que la perfecta naturaleza;
Eras esa creación que me aceleraba el pulso como si estuviera corriendo una carrera, esa que me llenaba de duendes recorriendo laberintos dentro de mi estómago, esa que brotaba en mi mente cascadas serenas y expandia mis pupilas, al ritmo que crece el universo

Escepticos dirán:
Física y Química pura; mecanismos entre hormonas, exaltación de sentidos, cambio en la respiración y palpitacion... Todo por una función biologica. La de reproducirse. Mero instinto de procreación.

Pero la poesía me dijo:
Son cometas en el aire en un verano fresco, son las risas de los niños jugando en el jardín, son pájaros rompiendo jaulas, acrobacias en el circo, pociones de risas para enfermos, sirenas en la piscina, animales escapando del zoológico, soles en la luna, flores en el desierto...
Y todo, en sintonía con la más bella canción, de la orquesta más magnífica del mundo, cuyos deseosos sonidos explotan como burbujas en una copa de champán, por mi boca, por mi cuello, por mi pelo, entre mis manos, entre mis uñas, entre mis piernas...

Y no exagera cuando además me dice, que me nacían plumas, o tal vez pétalos, o quizá atardeceres, de la piel.

Mi primer amor:

¿Cómo no iba a querer morirme, si es imposible, volver a sentir todo aquello?