El susurro del amor...

Fue el susurro del viento,

que como mil corceles,
galopantes,
me alerto.

Fue la suave melodía,

de las estrellas rutilantes,
que iluminaron tu figura,
bella y esplendorosa,
como la majestuosidad sideral,
provocando,
espasmos sensitivos,
en mi ser interior.

Fue un susurro,

un primer palpitar nítido,
alerta impresionable,
que,
al contemplarte,
comenzar a vislumbrarte,
duplico en un sinnúmero los latidos de mi corazón.
haciéndolo explosionar,
en mil partículas de ti.

Fueron los susurros,

de las alondras del destino,
voladoras imprevisibles,
que,
bajo el manto de un espléndido cielo,
del color de tus ojos,
y un calmo mar,
como tu firmamento interior,
cruzaron tu vuelo gaviota,
con el mío,
depositándonos,
en iluminadas playas sensibles,

en el inicio,
de,
nuestro vuelo,
hacia,

¡El susurro del amor!

Reservados todos los derechos Santiago Oreggia©