Hermano...

He conocido miradas,
Miradas capaces de hipnotizarme y hacerme cumplir las ordenes de una hermosa dama,
Miradas de caninos que expresan mas sentimientos que tu cuaderno de poesia,
La triste mirada de alguien que sin dinero, no tiene nada que comer, y sé como se siente, pues, en el espejo esa mirada ya capte,
Esa profunda tristeza en los ojos de alguien que ha perdido a un ser querido y la gran felicidad de un humilde niño con su nuevo regalo,
El orgullo que luego del esfuerzo se posa en los ojos de una madre despues de un parto,
El vacío de mi propia mirada, que aun sin verla se que esta en mis ojos clavada,
Aquellas de satisfaccion acompañadas por un sencilla sonrisa que te ordena el corazon son mis favoritas,
Las miradas asesinas que luego de una traicion ofrece un alma destrozada, he conocido muchas miradas y ellas me han conocido a mi,
Pero ninguna como la tuya hermano, la tuya expresa un dolor mayor y el sentimiento que lleva dentro creo que es la desilusión, nunca te vi asi, o al menos a tus ojos,
Ojos color canela que se confunden con la candela en su interior,
Tan expresivos como al contrario,
Tan cansados como amargos
Y tan tristes como el dolor...
Si, las mujeres son un veneno delicioso, como me enseñaste, ahora te lo recuerdo yo a ti;
Si, las mujeres tienen una maldicion,
Para a los verdaderos caballeros hacernos sufrir y aqui es cuando se muere pero el corazon no para su latir.