El viejo y el tiempo.

poema de J. D. Grotz

Ya pasaba el viejo,
usando su bastón de roble.
Escapando del tiempo,
teniendo una vida siempre noble.

Ya los jóvenes a su alrededor,
el con detenimiento miraba.
Observaba sus conductas,
Y muy para adentro pensaba:

"¿A donde van todos estos jóvenes?
tan apurados y sin razón.
Si terminaran viejos y huyendo,
como yo con mi bastón."

Y el tiempo sin embargo,
ignorando su pensamiento,
se seguía moviendo.
Al viejo persiguiendo.

A todo esto,
aquellos jóvenes apurados,
seguían corriendo,
huyendo de sus pecados.

Al final del camino,
cuenta te darás.
Que el tiempo nunca se detiene,
Y de él huirás.

Así que no corras mas,
que lata despacio tu corazón.
Camina toda esta vida,
como el viejo del bastón.