tacto

poema de tadeus

Decir "dermis" o decir "piel" nos hable de un salto
un claro, como el que existe entre la luz y el arco iris
o silencio que pervive detrás de todo vano decir
pues hablar de la "dermis" es señalar lo biológico
descriptivo y sin emoción alguna, mientras que "la piel"
un deseado umbral que delimita y muestre como nadie
lo oculto siempre presente en nuestra condición
o la pasión que existe en cada uno de nosotros.

Porque la piel es ese sensor a la vida
de lo previamente aceptado
come es recibir el tacto, la caricia y quizás ternura
y por ello, jamás manoseo por la potestad determinante
de la propia piel.

Si te preguntas ¿cómo umbral,
¡qué delimita y qué muestra la piel!?,
a lo ajeno y lo propio,
pues la caricia nunca es extraña, aunque, no sea propia,
pues todo aceptar transforme lo ajeno en algo propio,
al atrapar la piel con fruición, el esperado tacto
si eres tocado por la mano que deseas
y estando ella, también deseosa de tocar.

Si, la piel nos muestra, entonces, ¿qué nos muestra?,
a lo oculto y lo silente esperando por nosotros
porque en el fondo, toda piel y "sea esa la que sea",
se nos revele sensor del alma
habitando los cuerpos,
sede de nuestros deseos, fantasías y quimeras.

Y no sería posible el "ser" de la piel
si no fuera por lo numinoso del "tacto"
e ilusión buscando su más preciado tesoro,
la del iniciar la dialéctica sin fin.

La dialéctica del " tacto y lo tocado"
se nos devela profundo mostrar
a lo erógeno anidando en mujeres y hombres
palpar desde el palpitar previo
lo más íntimo de nuestra sexualidad deseante
haciendo del tacto destino final
a explorar en lo esencial de esa piel
su desnudez, porque lo esencial de toda piel
será por siempre "ser y habitar"
la dialéctica dicha.

Piel y tacto, ajeno y propio
incondicional apertura a tal experiencia
manos y cuerpos o lo ajeno apropiado
sensor del alma y fiel mudar
hacer de uno aquello ajeno.

La piel, esa profunda condición,
o espacio donde no existen desnudos
por un mero estar sin ropas
sino por esa invitación única, particular e intransferible,
hecha a solo uno y a nadie más, para tal cabal contacto
en esa irrepetible acción sin mediación posible
de la desnudez aun con ropas
aguardando sin prisa su pertinente momento.

Virginidad en devenido instante
la del tacto tras el tacto
y de la piel sobre la piel...........

Comentarios & Opiniones

Aldebarán

Bellas lineas en su esplendida musa que busca expresar lo que su alma encierra. Mis felicitaciones saludos.

Critica: 
Penelope

El sentir es un fenomeno propio de la piel, mas agudo y mas duradero que el tacto, y tambien menos fisico. La piel permeable al tacto, el sentir abarca mas que los propios sentidos. Induces al lector a una profunda reflexion. Un abrazo!

Critica: 
tadeus

Gracias Aldebaran por el felicitar

Critica: 
tadeus

Penélope, Prometeo no dio el fuego, pero no el rayo, nos dejo a medias, el alma posea un lugar en el cuerpo, sea ese el secreto del tacto y la piel, estoy seguro que ese secreto en ti dejo de serlo. Salve

Critica: