Una noche especial

En la nocturnidad del verano
salí un día a divertirme un poco
disfrutar del buen ambiente
y en casa no me diera un sofoco.
Todo estaba tranquilo y rutinario
la casualidad hizo que tú llegaste
esto para nada me pasa a diario
tu presencia me impresionaste.
En la noche éramos dos desconocidos
decidí acercarme para poder hablarte
la conversación fue algo entretenido
tenía la buena sensación de alegrarte.
Estuvimos jugando a los policías
investigandonos nuestras vidas
para nada hago esto todos los días
tú estuviste de lo más divertida.
Te gustaron mis imperfecciones
uno desde luego no es perfecto
fue animada las conversaciones
tu cuerpo es bocado suculento.
Me lancé a probar tus labios rojos
como quien salta desde un acantilado
me lo pedía el brillo de tus ojos
a ti te gustó y yo estuve afortunado.
Y fue una noche de lo más especial
para mí de esas de no fácil olvidar
al abrigo de la calurosa nocturnidad
como fieras nos devoramos al besar.
Llegó la mañana y nos despedimos
estoy deseando de verte para repetirlo
de verdad nosotros nos divertimos
tan felices como la libertad de un mirlo.