Doblaré las alas

El camino salvaje de las espinas

La brisa airea
la estancia de mi ser,
la razón es un
jarrón que esta derriba y
los pedazos los
recoge el silencio.
Abro las puertas a los
barridos del viento,
(mi idea del soñar,
en un cielo tranquilo interior,
es una estrella apagada)
gotas ligeras
mojan mi rostro.
Podría abrir mis
venas bajo los árboles y
antes de que muera,
recordar solamente
la alegría matinal
que eligió la esperanza.
(Siento el deseo insano
de matar a las mariposas
que se posan en mi cara,
anidada con flores de
raíces congeladas).
Cruzo el camino
salvaje de las espinas,
callejón sin salida,
donde los sueños habitan
en un cuerpo frío.
Mi manera de amar
es una catedral de
mutismos elegidos y
la escalera de sueños
es la imagen de una mujer
que no se materializó.
(Momento donde el pasado,
como un recuerdo amargo
regresa convirtiéndose en
nostalgia).

Doblaré las Alas

Mi paso terrestre,
oscilación del cuerpo,
altar adornado
mientras los ojos
dejan un aire lacustre y
la ligereza de una lágrima.
Sobre mis heridas descubro
un desventurado
depredador negro
que clava sus garfios afilados
en el corazón.
Sé que no escupiré sobre
la imagen blanqueada
de la muerte, ni en ese galopar
al borde del abismo que es la vida,
ave perdida entre la bruma.
Doblaré las alas
junto a mi cuerpo
como pájaro herido y
adivinaré en la sangre
los caminos que deben
recorrerse.

Pesadumbre

Peregrino inaccesible,
silencio serio,
mundo en angustia,
hiel que explica la amargura.
Soy el que simplemente
se condena para aparentar
una serenidad majestuosa,
máscara de la vida.
¿Por qué será que tengo un gusto
que ya no es canción
y además el piano mudo?
¿Para qué beber
si la botella no preserva el
calor ni la razón?
¿Cómo cantarte
con la garganta seca?
¿Cómo vivir si no puedo
devorarte al beberte?
(así es imposible digerir tus huesos)
¿Y cómo nombrarte
si soy el que se ahogó en tu calma?

Hay Días Así

Ciertos días tienen dejos tristes,
es como si en ellos
la vida hiciera una pausa,
pantallas oscuras,
pensamiento vano,
(las flores modestas
se marchitan rápido).
En la distancia perdida
el cuadro de una
época que no existió,
una ilustración,
una eternidad que disturba.
Un silbido que se convierte
en palabra, testimonio de
mundos internos, testigos de la
poca intensidad de la luz
y la miseria de
nuestras pequeñas vidas.
Ansioso, lejano,
el cuerpo ofrece al
mundo nuestra voz
y no le alcanza para articular las
palabras para decir que
se es interno, débil,
en medio de la oscuridad
indolente del mundo.
Nosotros allí, inalcanzables,
eternos, al borde de estallar
en palabras, para reconocer
que nos dormimos
en la hoguera de
una vida vana diversa.
Noche sin fin, estancia vacía,
el tiempo pasa,
a lo lejos se oyen lamentos
entre la lluvia de
recuerdos en el ático.
Vuelta a la llave,
árbol inclinado a la tierra
se derrumba,
sueños no soñados,
el universo en su abismo.

Palabras

La primavera en mi
boca se despierta
entonando una canción,
como un viento
en que se inserta el color
de las palabras,
a las cuales la
noche se entrega
entre los labios.
A veces hay algo en ellas,
la vida implicada,
una boca gritando
pasadas tristezas.
Hay distancias a las que
llegan en sueños imposibles,
profundidad debajo de los ríos
en donde los efectos
de ellas se ahogan.
Llevo en los labios
los sonidos de un día,
para morir usted
oye las palabras olvidadas
sin aturdirse demasiado.
Se oyen como el trepidar de
pasos sobre hojas secas,
el bosque es tan tupido
que las bocas no
pueden ser encontradas,
podemos silbar para asustar
a los de adentro,
de tal modo que no se
oiga más que el viento frío
entre los dientes.

Comentarios & Opiniones

La Dama Azul

Un placer de lectura, la profundidad de vuestras obra expresadas a través de los trazos metafóricos.
Reciba mis cordiales saludos.

Critica: 
La Dama Azul

"Mi manera de amar
es una catedral de
mutismos elegidos y
la escalera de sueños
es la imagen de una mujer
que no se materializó."...

Critica: 
fernandotejada

Gracias Gabriela por tu opinión calificada.

Critica: 
fernandotejada

Mis agradecimientos maestro Joel.

Critica: