Poema 26/2016

Si me regalas el brillo de tus ojos,
no tendré que visitar a las estrellas;
ni deslumbrarme con el lucero misterioso,
que con su luz, por la mañana me despierta.

Si me regalas el brillo de tus ojos,
la oscuridad partirá sin darse vuelta
el alba encandilará la sombra,
y el sol, se enamorará de ella.

Si me regalas el brillo de tus ojos,
la noche oscura se hará rubia tiniebla
el atardecer usará velo de novia,
y el mediodía sentirá que no se acuesta.

Si me regalas el brillo de tus ojos,
las pinceladas de la aurora serán perlas
las pestañas de palmeras rozarán el cielo,
y la mañana pedirá que el sol no duerma.

Si me regalas el brillo de tus ojos,
se inundará de fuego la tormenta
las cortinas de la noche, nerviosas con la brisa,
se abrirán, para que pase una luciérnaga.

Si me regalas el brillo de tus ojos,
la galaxia celosa intentará, expandir sus alas;
porque aún con miles de astros, se quedará pequeña,
ante la maravilla del amor, convertida en llamas.

Si me regalas el brillo de tus ojos,
el mar, como pintor de sueños, reflejará tu cara
y caminando por la arena, mi corazón dichoso,
para que la luz no muera, se encenderá de ganas.

Zadomen