Escrito 1:Somos.

《Ser callado no es un defecto es nuestra capa para no ser lastimados, para muchos somos perfectos, no saben que en realidad somos imperfectos como una rosa marchitada en un jardín lleno de girasoles. Nos ocultamos en el silencio para que no nos juzguen por nuestra apariencia, también nos llenan de halagos por nuestra esencia misteriosa, nos tratan como cachorro que muere de ternura; tengan paciencia y verán como se aburren de nuestra existencia.
Nuestra timida es una bendición al igual que nuestra maldición, nuestra ventaja es que nos sobra la imaginación y la desventaja; es que no utilizamos la libertad de expresión, y la perdemos por no poder hablar, solo nos queda perdernos en la melodía de una canción. Somos una manada de conejos que huyen cuándo se acerca un desconocido, nos gusta la soledad, es nuestra mejor amiga y no un simple conocido, bienvenidos a la oscuridad, que me trata como su víctima y yo a ella como mi verdugo: Tengo el síndrome de Estocolmo, me enamore de ella. Nosotros no tenemos voz para gritar nuestros disgusto, somos mudos a voluntad propia y gusto, cuando hablamos te metemos un susto con nuestra sabiduría, de la penumbra sacamos lo que es justo para los injustos, deben de saber que los callados somos astutos.
Palabras nos falta por decir, solo soltamos pocas.
Nos llaman fantasmas, todos nos tienen en un esquema de raros y en eso tienen razón y por ello no hablamos del tema. Mudos a voluntad, es lo que somos.》

Maqueta 3: Después de mí infierno.

Escrito 1: SOMOS.

AUTOR: Arnold Uriostegui Neri.