MIRANDO ESTRELLAS

Cuando estoy sólo en la noche
oteando alguna lejana estrella,
de mis sentimientos hago derroche
haciendo en mi corazón mella.
Su blanco tono me recuerda la nieve,
su tibio resplandor, la llama de hoguera;
tan lejana que nadie a llegar se atreve,
de las aguas del cielo siempre marinera.
Pues ella representa la esperanza
siendo pregonera de un radiante día,
aunque a veces refleje notas de añoranza
en su silenciosa y nostálgica melodía.
Consejera de la luna,
llanto disperso del universo,
ojos que brindan su cuna
a la musa creadora de versos.