Sinfonía de la inmanencia infinita

Cae la tarde
Como a caen
Las piñas
De los árboles,
Como caen los piñones
Sobre el caldo
Que cae donde yo caigo
Observando el pino
Erguirse
Al caer de la tarde.
Caen los pinos
Se levanta el fuego
Cambian su dirección
Los caminos
Así mis pasos
Recorren
Este laberinto
De laberintos
De laberintos.
Cae mi sangre
Y se la lleva el río
Cae el agua
En cascada
Y se la llevan
Los sueños
Que sueño
Y me sueñan.
Cae mi carne
Sobre la tierra
Caen los gusanos
Cae mi conciencia
Y la levanta el viento
Se esparce mi locura
Cae en los niños
Como láudano
Sobre un dolor vivo
Cae el cristal
Sobre el mar
Hirviendo ebrio
Caen los anzuelos
Caen los peces
Remontándose
Los pájaros caen al cielo
Cae la luz
En todas direcciones
Cae la noche
En ninguna dirección
Pero cae,
Cae pulgada a pulgada
La tierra
Como una pulga
Diminuta
En un universo diminuto
Cae el universo
Sobre el cosmos
De mi cuerpo
Cae mi cuerpo
Sobre tu cuerpo
Enorme de amor
Cae la brevedad
Simiente brevedad
Cae la suerte
Y es recogida
Por el que cae
Cae la flor
Cae su aroma
Cae la abeja
Cae la miel
A mi lengua
Que cae
Y mengua
En su dulce grandeza
Cae el tigre
Sobre su presa
Cae el horizonte
Sobre sus ojos
Desaparece
Y vuelve a caer
Cuando desaparece
Cuando ya
No podía desaparecer.
Cae la envidia
Como cae la lluvia
Cae el hogar
Donde menos
Te lo esperas
Caen las estrellas
A mis ojos
Caen los caminos
Petrificados
En las constelaciones
Cae el tiempo
Cae tierno
Y liviano
Como el heno
En la memoria
De la vaca
De mis sueños
Intestinales
Cayendo sobre la tierra
De humedad caída
Cae la primavera
Caen las hojas
Caducas caen
De sus brotes
Cae la tormenta
En lo más profundo
Del océano
Cae mi mente
¿Dónde cae?
Cae mi mente
Sobre el verso
Cae la hiedra
En busca
Del firmamento
Cae el tallo
De la tierra
Cae el vacío
Saciada la nada
Caen las palabras
Cae la azada
Cae la tierra
En su montón caído
Cae el descanso
Cae la fresca brisa
El espectro silencioso
Del campo caído
Para mis manos
Cayendo ágiles
Y cayendo frágiles.
Caen los muros
Indestructibles
Derribados
Rodeados
Ignorados,
Cae la verdadera música
Cae el falso amor
Cae brillante
¡De qué manera!
Caen las promesas
Sobre tu espalda caída
Cae la esperanza
Si posar
Sin cesar
Sin sanar del todo
Cae angustia
Sobre el placer caído
Cae el deseo
Cae el dolor
Y se lo lleva
De trofeo
Cae la ceniza
Que parece no caer
Cae el suspiro
Cae para crecer
Cae el sudor
Empapando
El caer de la voz
Cayendo en mis oídos
Míos y de todos
Caen los errores
Sobre aciertos
Que caen
Sobre cimientos
Rígidos
Por inciertos
Cae la soledad
Cae la noche
Con su sabio caer
Sobre el humo
Cegador
Caído
En mi caída
Sobre el lecho
Efervescente
Creador
Caen burbujas
Sobre alfileres
Que caen derretidos
Caen en revelación
Cae el paradigma
Cae relativo
Mi aliento
Cae silbido hilador
Cae Dios
Cae el adiós
Cae inmóvil
Cae
Cae
Cae
Cae
Cae
….