Prosa: El último aliento de una vela extinta

Quiero escribir poemas hermosos en verso, pero ya he olvidado como hacerlo..

Quizás en realidad nunca supe.. Y solo me creia ingenioso..

Por eso recurriré entonces a la prosa como recurso literario, para drenar cuál hemorragia algunos versos..

Hoy ya no se ni cómo decirte que te quiero.. Ya no siento que necesites saber que te extraño..

Me pierdo a veces en el recuerdo de lindos momentos del pasado.. momentos que atesore y cosas que no te parecían adecuadas..

Cosas que para ti un estigma significaron.. Así que decidí ya no hacerlo más..

Y ahora como el tonto que soy siento que estoy más alejado.. Porque ya no tengo ni fotos donde verte.. Ni videos para recordarte..

Es como si.. entre todo un basto universo que vive solo por inercia, Murieran de Alzheimer injustamente solo nuestros besos..

Sin importar que tan tiernos, que tan apasionados, que tan eróticos, o que tan improvisados hayan sido en su momento...

Y mi subconciente ya irritado se hace consiente y declara..

Es como si se acabaran las miradas, y cómo si se quemara el cielo entre brillantes llamas..

Y a su vez ni un rayo de luz se dejará ver..

Cómo si se derritiera el suelo, y sin piedad entre espinas de rosas muertas nos sepultará..

Cómo sombras frías que apagan los sueños de amor, de futuros ficticios que juntos planeamos, dónde el verbo, amar se conjugabá en todos sus tiempos

Y ahora muertos sin gloria que le acompañan, cosechan el fruto amargo de la victoria..

De la victoria del fracaso..

Fracaso que se apodera de lo lindo y y hermoso de un amor pretérito que nunca quisimos que expirará.

Mi razón tantas veces cegada por mi orgullo reconoce finalmente que no cumplí lo que nuestro amor ameritaba.. Perdóname por ser un grandísimo estúpido; y no atreverme a ir más allá de mis propios límites, se que por siempre me arrepentiré de no ser el hombre que pedías que fuera..

Pero igual... Ahora siento que ya no importa nada.

Somos el vapor ausente de una vela muerta que cuya luz ya se apagó..

Y solo perdura su calor en nuestras memorias como algo abstracto, distante e imposible de tener, pues la vela consumió toda su luz.

.:Siempre existirá en mis recuerdos el último suspiro, aquella luz brillante y el fuego abrazador de la vela muerta T.M:.