EL BANQUETE DE LA VIDA
poema de Libélula
Pedí a la vida que me sirviera todo el banquete porque me sentí merecedora de saborearlo. Ella, en su sabio fluir, me ha ido mostrando que degustarla implica traer cada ingrediente a mi mesa con amor, humildad y gratitud; que los sabores se esfuman cuando pretendo retenerlos; que la calidad y cantidad de ellos depende de mi capacidad para compartirlos… y, lo más importante: que el boleto de entrada a la gran cena es aquella conexión adecuada, que me permita "ser" antes de enfrascarme en el "tener".
Comentarios & Opiniones
Belas imàgenes adornan el banquete de tu vida,millones de estrellas y un fraternal abrazo querida Libélula!!
Reflexiva obra, buenas imágenes las de su obra
" que los sabores se esfuman cuando pretendo retenerlos; que la calidad y cantidad de ellos depende de mi capacidad para compartirlos…"...
Reciba saludos cordiales
Gracias Lore y Gabriela. Las abrazo.