PERDIDA.

PERDIDA.

Y le decían perdida,
por ofrendar su corazón,
por amar tanto en la vida,
se le juzga sin razón.

Insustancial el juicio,
de quienes no saben de amor,
indiferentes al suplicio,
con su infundado rencor.

¡Oh! si el mundo supiera,
de tu castidad y pureza,
no emitiría condena,
si cómo el mundo fueras.

Por parir un hijo eres perdida,
sacrilegios de boca maldecida.
Mujer: Por Dios eres bendecida.
Tu alma fue por Él redimida.

Yo tu alma bendigo.
Tu corazón, tu vida,
condeno toda ofensa vertida,
por seres de mente corrompida.

No importa te llamen perdida.
Que nada es peor que la herida,
de amar sin ser correspondida.

Cuanta lágrima derramada,
cual perlas a tu infortunio,
porque una noche de plenilunio,
en acto de amor y conciencia,
sin liviandad ni concupiscencia,
ofrendaste tu pureza tan preciada.

Más bendita eres Mujer,
desde tu misma creación
y ningún corrupto ser,
podrá vedar tu bendición.

Sé feliz Mujer plenamente
y haz dicha el fruto de vientre,
que el Creador omnipotente,
ha premiado tu amor inocente.

Autor: Víctor A. Arana
(VÍCTOR SANTA ROSA)
Noviembre 18 del 2017.