MARIMBA MÍA.
MARIMBA MIA.
Tus alas etéreas se elevan,
con tu voz a los confines
y tus regios arpegios llegan,
al corazón de los chapines.
Ancestrales acordes de patria,
que se encarnan en el alma
y esa remembranza grata,
nos prodiga paz y calma.
¡Oh Marimba mía!
canta libre cual Quetzal,
que es grata sinfonía,
tus arpegios de bosque real.
Marimba: Fuiste noble cuna,
a Reyes de la gran Iximché,
novia del valiente Rey Quiché,
entre noches de luna.
Que tu partitura canora,
cante a esas noches de luna
y a la beatificante aurora,
de los bosques entre bruma.
¡Oh Marimba!
Eres gracia plena,
cuando de tu tecla morena,
se escapa una nota que cimbra.
Canta Marimba mía:
Tu voz siempre es triunfal,
lleva alto acorde y melodía,
tanto como vuela el Quetzal.
Palpite tu corazón de madera,
que en tu alma de hormigo,
mi alma está plena contigo,
aun fuera de nuestra frontera.
Autor: Víctor A. Arana.
(VÍCTOR SANTA ROSA)
Marzo 14 del 2021.
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