No Corras Corazón.

Yo intente hablarle mi a mi corazón de ti,
decirle todo lo que sentía por ti,
todo lo que al besarte me provocabas y cuando lo ice,
emprendió una gran huida al infinito.

Me decidí a perseguirlo a mirar en cada constelación
de mi ser y cuando tuve sospecha de donde estaba
entendí que siempre me acompaño, Raro fue cuando me dijo:

Aun tengo una espina que quiero sacarme
pero no he podido hacerlo ni tampoco desahogarme
ya que tu te dignas a creer en falsas promesas
cuando de verdad sabes que ella no vale
la pena pero la verdad solo lucha por lo que quieres,
no te preocupes por mi, entre mas cicatrices tenga yo
mas aprenderás tu.

Con una mirada de tristes recuerdos todas la noches
llorando y por ella y entro en mi mente la capacidad
de entender cuando mi corazón me
consolaba, acariciaba y miraba para que yo pudiera
salir de estos momentos, pero ahora entiendo
que nunca podre salir de esta prisión
que es su cuerpo.