La Dicotomía

Estuvimos de acuerdo en que era parte del contexto.
La comunicación fue penosamente fluida.
Tal dicotomía nos hacía ver absurdos y asertivos a la vez.
Comenzamos por la historia más grande de la humanidad.
Antes y después de Cristo.
Esta historia en una decena de años se hizo obsoleta.
Un cuento erótico tiene mucho más que contar y profundizar sobre lo que somos.
La perversión natural, la pasión personal, la sensibilidad del alma por el cuerpo.
La muerte del Hijo de Dios con sus estigmas.
La extraña dominación consentida en un cuarto de motel.
Es que ya no hay luces de neón en los bares.
Un cristo con aureolas fosforescentes se ve desde el cuarto piso.
No tiene ojos.
Tiene unas cuencas de ojos con luz azulina.
Yo caía en un abismo ridículo.
El desadaptado obviamente era yo.
Tenía que decir las cosas con mucho cuidado.
Fascista, conservador, mentiroso, cínico, todo eso estaba en juego.
Ser rápido era un requisito, y ser un poco lúdico.
No era permitido mencionar el Amor, no venía al caso.
Y que hablar de la ternura, ahí me destrozan.
Un poco las cualidades cuánticas, indeterminación e incertidumbre.
Uno puede entrar un poco, pero, igual la sospecha no se oculta.
Las claves se encuentran en las palabras tolerancia, liberar, YO, esta es la mejor de todas.
No tenía como fundamentar nada, excepto, mi opinión.
Recurrir a los elementos, el sol, el agua, la tierra.
Como salido de anticuario, con cosas viejas que no combinan con nada.
Sí, Nietzsche murió de sífilis. Algunos puntitos no están demás.
Sí, claro, Maquiavelo, en realidad nunca lo he leído.
Y si expusiera el taoísmo, los chinos hoy son potencia mundial.
Lanzaba y lanzaba con rapidez.
Todo volátil, ajeno de todo aquello que de algún modo considero profundo.
Sartre se acostaba con sus alumnas.
Machado pasaba en prostíbulos. No era ambiente apropiado mencionar a Leonor.
Claro, Oscar Wilde era gay. Tampoco un buen momento para hablar del “Artesano” o “Del ruiseñor y la rosa”.
Yo no soy un santo y pocos lo saben, esto me ayudaba bastante.
He visto como es la noche y no en ayuda comunitaria.
Fue feroz, brutal. Pase años escribiendo sobre los ángeles caídos.
Peor que la pobreza, entregados, abatidos, exaltados, ángeles sin alas.
En todo caso, yo sabía a donde iba a llegar todo esto.
Nunca voy a decir que no pertenezco a estos tiempos.
Exactamente al revés, soy de este tiempo, pero, no de ese tiempo que dicen que es.
¿Cómo fundamento una virtud?
Es mi deseo, es mi elección, no tiene porque ser la de otro.
Hoy, acusar de dogmático,hegemónico, anacrónico e intransigente es café instantáneo.
Finalmente me quede callado. Un poco de amargura por usar la humanidad de ciertos filósofos.
Salí a la ventana, el Cristo de luces azulinas lo habían apagado.
Se reflejaban las luces del farol en el asfalto.
A lo lejos una sirena nos recordaba que la noche en la cuidad también se termina.
La dicotomía fue,
que ni yo ni nadie con sus ideas detuvo la noche ni cambio la mañana.
Posiblemente por eso no existe la verdad absoluta
y la verdad es una interpretación.
"Lo único real es la realidad y la realidad es lo único real"