Enamorada

Reías, porque sin mucho esfuerzo,
él se apoderó de tus sueños y tus besos;
creías que a su lado vivirías,
ese amor que siempre anhelaste tener;
lloras, porque ahora miras,
que nada resultó ser
de lo que tanto esperabas;
hay lágrimas en tu cara,
también en tu corazón,
saldrán en cada momento,
te acordarás de su decepción.
Lloraras sin detenerte,
porque sigues enamorada;
el amor te hace falta,
vives insatisfecha,
queriendo poner una fecha
que en tu vida sea especial;
lo único que tienes,
y no quisieras recordar
son esos días
en que no dejas de llorar…

Te levantas, porque un día apareció,
alguien que con sus poesías te ofreció
escribir una nueva historia de amor;
sangras, porque impides la entrada,
a lo que te está haciendo falta,
tanto lo necesitas, que te empeñas por encadenarlo,
has preferido cambiar lo dulce por lo amargo.
No quieres poner en libertad,
el amor que tienes escondido,
prefieres hacerte daño,
vivir en la oscura soledad;
detienes el paso
a un amor de verdad…
Será que te acostumbraste
a querer llorar y llorar;
seguirás leyendo sus poesías,
aquellas letras que no terminan;
de ti seguirán hablando,
mientras tu seguirás llorando;
sabiendo que él te está amando…
Llorarás sin detenerte,
porque estás enamorada;
su amor te hace falta,
vives insatisfecha,
queriendo poner esa fecha
que en tu vida será especial…