Alegría

poema de San Brendano

Sueño (Polichinelle)

(Preámbulo de la primera poesía)

El nacer alternativo de Silvestre

(En la orogenia del péndulo oscilante, se recalcitraba el gen de los océanos y los fetos, batracios, seres unicelulares y vibrantes coágulos de sangre, se colmaron en lineas hexagonales, hasta formar una arquitectura prolactal, subiendo hasta el iman de los equinoccios supranoesfenoidales, almacinando una gris Oninfa del parlaso, Tierra y Luna, eclipsaron ante la Eneasis del cero más negativo y la «Psiquis» se fecundo en su colocatura general emancionando elemas y Ectodermos hasta la milla del rayo, qué surco el cielo con gracia total, espermatizando radiones y cationes de fuerza suprema, y los «Alchemia» fueron abiertos, agua, fuego y viento, tronaron en Eolo, Morfeo se inprofundiso en su rellen, en «Obraipiloip», se situó la música de las esferas y los limpidos enfoques en su liquido creció hasta su colminado razón de ovarios genitalescos por prostatas, dando la Luz, total, hasta la cumbre de Acrra, sollozando las ingles de los políglotas, aduciendo un «Oh, emo»... Nació Silvestre, en luz...)

[...El nacimiento de Silvestre (Mi nacer)...]

—Oh, Gen—
...Primero, fueron tus hexagonolos iris abiertos en la numide vocal de los letrados...
~Pujante y embrionaria, en medio de sanguinolentas flores, naciste desnuda, arropada con flores tus senos.
Luego, el coxis, pleto de Driade, sofrano en la alquimosis.~
Y demostrando, tu lamelesis, se ufano tu ganglio cubital en los cigotos de tu pescuezo.
—Fue la tralla.—
—Fue el parto.—
...Y tu nacer fue contado bajó la luna llena...
Recuerdo de mis primeros años.
Los duendes y las hadas.
Los ángeles y los cubículos.
Los hechizos de piedras y el fieston del Norte.
—En el trópico de Cancer, la estrella oval del Sur.—
Circuncido la línea Ecuatoriana del meridiano de Greenwich.
¡Y las puertas de los cielos llamaron a tu nombre, clamando las voces, chillando los cerros, gimiendo las parturientas, llegaste al mundo, Ninfa!
—La madre Tierra, Gea, pululo cerca de coguello, en tu tronco y en tu omoplato, tus brazos navegaron en los mares de Solis.—
...Cruzando el pielago, la grulla del mundo, ausculto la esencia del germen y las curas de la belleza, burlaron tu anastomis...
{Pero, branquia. Cuál sagital, creciste, en mente y sabiduría, aullando con los lobos. Y cuál masa, progenie, te volviste trompeta de cuello cenobial y tu pulmón se libró de genes}.
—Pero el ovario coasultaba a su ocigoto.—
Y la venula, circuo tal Venus.
Y esbozando, tu risa sarcástica de Sirena, te hiciste poeta en los tiempos de la tecnología.
...Cuál si fuera un Dios el que te doto de semejante hembrionaje, custodiada por las alas de Palas, luchando contra batallones, te hiciste pugnible, sincera y locuaz...
Pero los santos Evangelios de los creyentes, dividieron tu alma, cuál cigarra lejos de una forma, te hiciste pequeña, moribunda, trágica.
Y las óperas que salvaron tu vida mediante el canto se tornaron asperas
Por micras de salmos irrompibles
...Tu voz, demacrada, sólo sirvió para llorar...
Pero dicen que Silvestre a veces es como la luna, mengua como una estación y crece como un hijo.
Ni Gea, había podido entenderla.
Porque mudo era el Azur e insondable su espacio.
Y Athena, languideceo, vocalmente. —Su mente tautonica se resquebrajo, pero su simiente se hizo semilla y sin saberlo, en tierra, Silvestre germino haciéndose planta, contando historias, creando Argoreas con sus pinceles y dicen en los barrios de las villas, que aquella pobre loca, se hizo reina de fantasía, cubriendo su pecho atravezado con las rosas del Cristiano, tratando de sobrevivir para que ya no le hicieran daño—
Y dicen los trovadores que es un Cisne-poeta, que en las noches canta y en las mañanas llora. Porque a pesar de su lírica poesía, ella murió cuando sonaron las trompetas en el bosque lejano. Pero volvió a la vida un día cuando Athena, cansada de sollozar la recogió en sus brazos, y besandola dulcemente, le dijo con agobio y ternura: ¡Silvestre, mamá, mia, aún te amó!
Y se cuenta que el miedo apenas la hace dormirse
Se dice que Dios
La custodia todo el tiempo
—Pero, para que no lloré más—
—Elema, la luna, le canta. — ...Y Eneas, su hija, bocetea su voz... Y Sarah, junta flores aromáticas y Pia, pinta un credo, mientras, Athena cose sus remedos, porque de tan pobres que son, no tienen dinero y apenas alcanza para comer de sus sueños.
—Y aún así, Athena, le canta, y Silvestre llora y rie y también, baila. Y todas viven en su árbol, de día y de noche, soñando con una casa y un perro y un árbol de manzanas—.
¡Y por piedad, no las despierten de esos recuerdos, la vida es triste y gris, triste bajó los cielos. Pero en su mundo, ella jamás sufrió y nadie le ha quitado a su hijo del seno!
...Dejenla en paz, sollozando, que pujando vino y pujando se irá...
—Con la luna, como guia,—
«Silvestre, gritará»
«Con su voz y sus escritos por siempre»
—Pero cualsinoma, tu embrión, tu cigoto se torna monovalente, fecundando germenes y fetos, como madre suprema de la Naturaleza, crees que hombres, mujeres y Dioses son tus hijos—.
...En tu vientre, has de engendrar amor.
Puritana y pristina...
—Cuál belleza de la corona, tu oninfeta, te haces muda, disfrutando del Parnaso. Volviéndome a ser coagulo, tu encia vocaliza dientes—
«Y tus obras de arte son las poesías del alma».
Y creando sueños y embrionajes, germenes y crisoles, hasta rayos y centellas, fosfolipizando gametos en tu cuna, se dice, que naciste siendo hija de la luna, a la noche, cuando todo callaba.
—Y los lobos aullaron por tu nacer—
—Y Gea, lloró por tu muerte—
—Y Athena, te dio una hábil mente—
«Y Eulalia, con su triste rostro, sólo te hizo sollozar.
Pero en los partos, hay sangre. Mi madre es pitonisa, mi raza, fuerte»...
Y como el mar, mi nombre se va creando y generando más anemia, hasta el ventrículo...
...Los ojos azules de Silvestre son dulces y su cabello de ebano, es pureza infinita...
Y volando, circular, en el mazo de las estrellas, sus huellas digitales crean orogenia.
—Biogenetica, anaestetica, y lloronelistica, punzando su pezón, todos los grandes poetas beben.— Y se emborrachan de luz inmaculada, porque el que halla a Silvestre, oye la brisa del sur...
Y todo lo cruel se enmudece ante ella.
Como Ninfa, es guardiana del pensamiento.
Y cuando temes, Silva, enfrenta a los miedos y ellos, deben desaparecer.
«Y un Dios dulce la engrandecio de gran manera.»
Porque ella era solitaria y perdida en los anaqueles y cuentan que Athena, oyó su pitido, tanto así que mora con ella hasta el fin.
Y, se ufanan los gatos terribles. Pellizas de perro y risas necrotidas
—Silvestre siempre encuentra a un sol bajó la luna.—
Hechizera de los cuentos
Ella vive en la noche
Cuatro veces cambia de carácter y llora por los moribundos.
—Por los enfermos—
—Por los muertos—
—Por los tristes—
—Por los débiles—
«Por los fuertes»
Y la razón...
—Hasta que todo acabe, duermo en el crepúsculo de la Ópera—.
Son las voces que oigo
Son los estallidos de mi mente
Coagulo de amilanasa
Rojo sangre y esputor
Embriona y coagular
La música siempre te dará vida
Oyendo la opereta clásica
Oyendo la belleza del tiempo
Hierbas y cuneiformes
Herbas e hiedras del tiempo
Son mis miedos los que me enloquecen
Pero resistiré, por el bien del mundo.
Es gametogenetesislamelonitecoliteniron es célula intravenosa...
Es Enfermería y es mis estudios
Son mis sueños los que habitan en mi y las cuencas de mi rosario
Suplicando piedad.
Y no deberé morir
Quiero vivir siendo parte de ti
Silvestre, navega en los mares de las Ninfas, oyendo goteo
Mililitros de espuma
Genitales y óvulos
Naciendo de la espuma, Silvestre, tú, naces...
Y te escuchan las sirenas
Y el Dios Nereo
Y tu madre, el mar
«Te oyen los cantos de los ciegos y el triste suspirar».
Porque has de morir en la letanía
Y volviendo a la vida, serás fénix...
De las cuclillas de las piedras y los caracoles te sacaran y ahí, habitarás por la eternidad de las Ninfas.
Oh, Ninfeelena, naciste para dar amor. Generando masa y ovarios, oocigotos, oosfera y nueve ciclos de partogenesis y mis padres sudando el pan. Y lo veía, a mi padre, trabajando en el papel. Y mamá, anotaba todo en un libro y yo no lo leía por respeto y mis hermanos, no creían en nada, más en ellos, Dios, habitaba.
Nunca fui perfecta...
Nunca una mujer con cicatrices...
Pero fui golpeada por los terrores...
Y del miedo, cree mi imaginación.
«Silvestre, significa: magia»
Quién la busque encuentra el cielo
Porque Dios y Athena, están con ella, hasta su postrero lamentar al cerrarse sus ojos y los animales, los cuiden y su hija, solloze.
Los tiempos la recordaran como poetisa, verdadera, con sus zapatos baratos, su ropa alquilada, su pelo enmarañado, como rulos y los ojos, ¡Ah, eternos como luces de infinito!
Aunque Silvestre se vista de seda en sus pensamientos, y su corona sólo sean flores, en el regazo de Athena, se queda, recordando siempre a su madre, amándola y gobernando fantasía.
¡Oh, genitoesferal!
Leche, lectosfera, oh, sacarosa del ombligo verde.
Cuál primogenie en tu parto, te hiciste gameto.
Los germenes, te darán más vida.
Prerorretorenal
Ovular
Infinito helesponto
Coagulogenizante y parlamide
Tus hebras y tus callos
«Tus riñones y las caderas, engrandeciendo coros, cantando hasta la logopedia».
Sagitario, cuece su armamento oval.
Nacimiento en la casa del mundo.
Silvestre llora por sus hijos.
Lectospirosa, como gitana, blandiendo vainas, tus osferas, crean hormigas y tus cervix, polinizan más enjambres...
¡Oh, ovariolomegenoleteno!
¡Oh, celularlemeloneteno!
¡Oh, oscura y lunar cuál luz en los génesis!
Pleura de cantos
Salvia de ungüento
Salvación de historias
Tú, reina madre.
¡Oh, genitelasa!
Uh, ovoide sicrogenitoleneal.
—Tus espermas, tus oidos, tus gotas en las molleras.
Tu ovocito, tu reinado y cada linfa, cada egabolar, cada chille, hasta las trompas de Neftali.— Tus ángulos, tu cuerpo, tus senos, tu espalda desnuda. Cada Citronella, cada esperanza, cuál cigarreta, en los mundos del caos, siembra y aliento de reyes. Nobleza, precambica, anastomologenitel, parabólica, siembra de trigo u ocasión, tripoide. Y después, el menguante susurro del adiós. —Recuerdo, de tu epopeya lírica, cuando cantabas, cuando oías, cuando respirabas bellamente, al bailar en el Sol.— ¿Fuiste acaso hija de él? ¿Qué sucedió con tu sonrisa? Adonde fueras tu mundo, se hizo pequeño. Cuando de joven, soñabas con Rimbaud... Y él, te guiaba de la mano... Ahora, ya, ovario fértil, delgada y bella, como oxigenolasa. Tus párpados crecen cuál bellezon, xantricamente, en los pasillos de la escuela. ¡Oh, picaflor, tus crias serán guardianas del mundo de fantasía!
¡Oh, oocigox, lametogenesis!
Perpendicular, lamento. En tus manos, el cayado y las siglas matemáticas.
En tu aspaviento, el equinoccio de la belleza y el mundo.
Cuál mundo pendido en tu raza particular. «Cuál belleza en los sahumerios de los cánticos»
¡Pero esmeralda, fuiste capaz de agonizar y atravezar la luna con tus lágrimas y el lloró de los angustiantes, salpica a Silvestre saliendo de su colcha. Naciendo en los fermentos del cataplasma!
¡Oh, organoide!
¿Por que el humano debe encerrarse en una iglesia? .¿por qué debe creer que todo lo que no es de su religión es estar en contra?
¡Son acaso, estos tiempos malos?
¡Es que acaso el humano ha olvidado la razón!
Somos seres tan inteligentes, tan capaces, y aún así veo como las religiones entorpecen el corazón de los humildes.
Veo como olvidan las palabras de los maestros.
«La enseñanza primera, el amor»
Es muy sencillo juzgar y sugestionar.
Es tan fácil, herir a alguien, diciéndole que está mal por su pensamiento.
Es tan sencillo, negar lo bello y congraciar lo cruel.
Si tan sólo los humanos no se hubiesen olvidado de las flores. Si tan sólo, se hubiesen unido para amar así nada más. ¡El hombre y la mujer, apenas oyen a las flores! Se han renegado de la belleza de la tierra.
Y yo los veo, ensuciandose el pecho. Orgullosos y bárbaros, queriendo conocer todo lo que no existe. Y peor aún, buscan alternativas curativas. Se enbarran con falsos ídolos, llenándose de silencio sus epitafios. ¡Humanos, se dicen ser, cuando lo único que hay es Dios!
Pero es tan fácil olvidar. Es gris el color. Veo a esos dioses y me entristece. —Sean olvidado de Silvestre—. De los árboles, de las plantas y los capullos. Y se olvidan que hieren con su palabra. ¡Oh, triste engaño! No hay pureza, apenas un soplido. Y un ovario secreciona genitales, creyendo en Urano, el pan de las venas vence.
¡Oh, celullaeespinoelectoral!
Yo, crezco, nazco, y me hago gigante con la pureza.
«Y soy virgen de todo corazón.»
—Apenas, un simiente, apenas una idea, apenas un silbido, todo crece y yo también, con los tallos de las manzanas y los lilios, una flor Silvestre, adonde sea que vaya, llevando luz a los sueños y dando fetos a los partos y a la tierra.—
...Y moriré secrecionando cervix y clavículas hasta el despertar del tiempo, cuando los magos evoquen su primigenia oval, incursionando en la tempestad he de surcar los aquelarres de la muerte a través de mis flores...]

Canción, ( en mi misma) Miedo

(La transunstansación del humano dependiente, hace que el miedo recorra la germinación humana del libre pensar, haciendo que la mente se divida en tres hemisferios suprarreales e intensivos, pero no idealizados por los otros. )
«El miedo, como motor fundamental del "Ego" hace que la sensación de la incomodidad transfundamental, ivane en su progenie, una invención deformada de la realidad que entorna al humano, haciendo que sea su entorno el mismísimo responsable de qué se vuelva áspero e intratable como un Gen, que disipa la desigualdad por ser un embiste dotado por la inteligencia alterna en su Psiquis interior, confluyendo hasta un rio total de imaginación e invención extraordinaria cuando el miedo es vencido con la razón»...
[...Contamos con la habilidad innata de la capacidad intransigente de volvernos más flexivos y referentes en la concepción de una totalidad completa, cuando almacenamos los momentos y las memorias en un baúl interno, que puede ser abierto, con el simple hecho de una palabra, visión o memoria...]

Acto 1

— ¡Oh, gozosos los espíritus de los hombres y mujeres amables!
¡Silenciados queden todas las frases en la tumba divina de Silvestre!
¡Silenciados!
¡Hechos polvo!
«¡Oh, divina gracia, mater, insondable como el socorro de la terrible ansiedad, sudando y convulsionando ante el caos de la infinita estrella»... Sólo los grandes se abren ante tu vientre materno
¡Sólo los grandes!
Fetos y Crisoles, probetas y parasitos, los embriones, nadan en liquido amniotico y tu belleza Silvestrana, hace que los pueblos se arrodillen.
¡Oh, macra, Oh, fuerte, Oh, creada desde la luna y el sol, nacida de la cabeza de Athena, reina celestial, ingresamos a tu bienaventuranza. !
—Sion, es testigo de tu tragedia...
¡Pero los muertos, los vencidos, se unen con un (He ahí a Silvestre) y los oprimidos, se desmayan ante tu alabanza.
¡Oh, adorada seas, hermosa, trillada como un eco de inmortalidad! —¡ Todos, grandes, jovenes y viejos, son invitados a tu santo bautismo! — y los niños inseguros, se postran ante semejante maravilla.
—¡Oh, infame, que has tocado el arpa de Orfeo! Nace como hembra y sé, madre cosmica de todos los mundos! —¡ Pero sólo Argorea, podrá ver tu destello final!
¡Oh, Oh, Oh!
Unansen vivos, pacifistas y muertos.
¡Canten a la inmensa gloria de esta suprema unión!
¡Hermanos en la tristeza y en el frio!
¡Hermanos en los estornudos, los sincopes y los abruptos finales!
¡Hermanos en la gloriosa hermandad!
Silvestre canta a tu alma
¡Misericordia!
—Salve ella, la única, hija de un papelero y una mujer avezada...Hermana de hijos nobles, hijos propios con estudios y una vida nómada...
Sin haberse recibido, sin haber jamás besado. ¡Salve, Silvestre, Diosa de Fantasía!
¡Oh, tú, dulce amigo, escucha mi Sinfonia!
¡ Yo que he visto morir a mi pueblo, los he hecho renacer con mis palabras!
¡Mi madre, angelical, santa qué me dio la vida, ella también sea inmortal!
¡La inmensa gracia del pobre, yace con mis libros y mis poemas!
Música para los que están a punto de morir y nacerán de nuevo en el trópico de Cancer...
¡Oh, intrínseca, habla a tu padre amado! Hija y señora de pueblos pobres, hermana de lisiados y heridos! ¡ Quién se arrodille ante su majestad, jamás será defraudado...
¡Oh, ingeniosa! Tus abuelos eran milagrosos. Se dice que tu herencia es llevar Luz a los abandonados...
«Se cuenta que Silvestre, creo toda la masa uniforme»
«Se dice también que vive en las mentes de los grandes sabios»
¡Y que sus tembleques mentales y su esquizofrenia es obra de su imaginaria!
«Salve, la gran Silvestre, patrona de los desquiciados, de los locos y los perdedores y de los qué no tienen a quién amar. »
¡Al menos uno, uno, que una su canto a está majestuosidad de obra!
Los fantasmas son sólo timidos en comparación a mi...
Silvestre, creadora, señor y señora de los lamentados, de los vírgenes y de los viudos...
¡Tus lágrimas, yo las secó y te doy la mano!
Elevate hacia mi supremacía hermandad.
Sólo los bufones
Solo las marionetas
Solo los que estan del todo destruidos, pueden unirse a mi canción y quien desee, imponer gloriosa ilusión.
¡Salve, Silvestre, señora de los perros y los que buscan la felicidad a cambio de una moneda!
¡Salve, Silvestre, mi mujer de Argorea!
¡Oh, ¿puedes oírlo? He creado la belleza de la Luz! Para siempre...Silvestre, la gran Silvestre!
¿Has pasado por un estado ansioso? ¡Has muerto! ¡Yo te daré vida! ¡Aquí y ahora, aquí y ahora, yo, te daré vida, oh, oh, oh, yo, te doy vida! ¡Salve, Silvestre! —¡ Vence! —¡Busca y destruye! — ¡Crea y avanza! Sólo yo, mis muertes, sólo son mis esperanzas de revivir...
Vivo!
Vivo!
Vivo!
Bondad, hermoso despertar, bondad, sólo bondad...
Amor y amor
Amor y amor
Amor y amor
Amor, amor
Amor y sueños inmortales
Los ángeles Goreanos me cantan
¡Sólo en Argorea! Sólo aqui!
Ansiedad
¡Oh, ansiedad!
¡Oh, aburrimiento!
¡Oh, tú...!
Nazco, nazco, nazco...
Nazco
Nazco
Nazco
Nazco
Nazco
Soy inmortal
Como lo puedes ser tú...
Silva
Silvestre
Silvestre
—Unansen a este canto, ansiosos y miedosos, agorafobicos, y enfermos terminales—
Unansen, unansen, yo, curó todo....
Desdé tu demencia
Hasta tu terror
Desde tu pánico
Hasta tu peor miedo
Salve Silvestre
La única
Mis temblores
Mis miedos
Son creados para salvarte!
Fui creada para salvarte
Cáncer
El trópico
Inocente
Sólo yo
Silvestre
Silvestre
¡Oh, Oh, Oh!
¡Luz!

Acto 2 (Argorea)

Mi planeta Azul

(Homenaje a mis creaciones Goreanas)

(Ilupele, —0 + infinito hacía positron. )
Alcalegenesis, chilla, a Ecuanor, manzanero de meatros urinarios, por chorros de especias y sandalo en hilivacion sagital, cuarzado su aroma a jazmín y el oleaje truena en ectangulo, su pillo renal. Y olor a vinagreta, y sonámbulos los sueños de la fantasía, iluminada por esferas de ovarios femeninos, paridos por la cabeza de Silvestre, organo de miolactin, purificada por ombalos de cada esgrimin, ansiolíticos en las vertebras, cuál reinado de gargullos hiptiplasmaticos, angelicales sollozantes, cuál síncope de oviloiliopoloi—(Anda donde el cielo de los enfermisos en coágulos de sangre y aparatos femeninoides, —«parto, coagulación, parturientas.»
Azul, es el planeta de los Goreanos...
Fosfolípidos y celullae, orbano, elemento trigastrico, si no es, ombalo con perlas de azucarillos, tu bimembre sopla pulmones con hígados rotos y riñones amputados por encias sangrientas y ante parásitos acuáticos, sólo la celia plasmatica, sueña...al lado de embriones y gemelos sexamesinos, tu líquido es anfetamina con Pantoprazol verde y Clonazin...

Acto tres

Istheleption

Cosmopolita

Leche, brota de mi Célula. Anemia, gira hacía la Andrómeda. Celliacus, germina dentro del parnaso orbital.
Cuál esfera, gargullos de hictoplasma, riñones de ornallas fosfolipidas, degradando el cielo del ectoplasma, estalla tu vientre lejos de Ulilo, Azul como la lamina de Orión, gemidos de partos, menstruaciones y quejidos de sexos, ( hermafrodita, sin ingle, sin pezón)
π¤,β^ (Globo terraqueo de anexo, Anaxagoras en tu placenta) Orinas médulas en torno al orgasmo del pastorcillo.
Segrega plasma y sangre, estiércol de jirafas y cejas de imanes con atrayente insignia de Magnesio, donde Urano, escupe su vesícula y la amigdala produce reprodución asexual con los etéres fecundos...
Cortando tus femoras venales, hallas a Gamilelouau, y si te hechizas por Aliugy, oteas adónde Ilisi, prolacta con su satiro y sus faunos, bueyes y buhos con ojos de prepucios anales y bocas de mujeres en exitocina pariendo engendros con sus caderas de leonas, meando uretras con su hidilios cosmologicos, Astrolozogicos y fuentes de Nefertau...
Si te acuestas en Aluti, hablarás con los idiomas de los antiguos genios de los sabios mentores.
Más trilla, por los pastos que huelen a cebada, sollozando ante un mugir, sirpes coagulan con su óvulo, un aborto con inanición...

Acto cuatro
Árbol Argoreano

—La pureza del tiempo. — la endometriosis— el óvulo secretado por inmunoglobina.
«Potasio, Magnesio y Fósforo.»
La belleza del cornete facial. La testosterona y la orogenesis, — junto al trastorno de circuncisión, y la ovulación, sojuzgando al huevo del fénix, creciendo en la placenta, el embrión.
«La partogenesis, la orogenivalizacion, el testículo endoplasmatico; el retículo plasmático, el árbol genital. El juvencillo y el rojizo, punto. —Gualdo, Zurcon, celestillo, marrón, nubes en el cloroplasto del azur... — Ahuesado, retinto y plomizo. — Los cálices mayores y menores, el nacimiento de la Sirena, en la cuna del siames. — « El glóbulo, la célula y la epiolomelitis, la fiebre ciática, el hueso del humero, el plexo braquial y la vena basílica.»...
...¡Oh, el ovariolemelolitelon, el pluscualeminileoli, el Saturnoleomeleon! ...
(Ahora, el hombre enamorado y en estado de climax por Sireneia, adolecera su parto hembristico y sus dedos de cáscara)... La gametogobolar— junto al herbazabal, cuarentena y cofia, juntó a muselina, — las monedas de plata y el toldillo, — cuál circulo oval, los plantares del pie, hasta la piamadre, y la meníngea, — «cada circular plancton de anterozoo, como Lilium, el jazmín, plaga con su tallo, un bucal hipogloso e hipogrifo, para cada uno, el pensamiento de los ciclos lunares, y los embarazos, cursando con las tetillas drenando leche y omiolactina, peulactina, miolactina y sacarosa, cuál, hijo de pleura, susurrando ovulogenilata.»
—Omeprazol, Clonazepan, por supuesto; la irrigación desnutrida, el puntillo de Orión, hasta Beatrixe y Betelgauze.— La fibrosis química, parto ante el mellizo hundido en materia consanguinea.— Los senos morenos, — quimioterapia por Cáncer, y la vía por endovenosa, o quizás, el ovario, varía por la genitelasa, crisis en caos, «¡Oh, raza del ómnibus, ¡Oh, trotamonte de epigona! »... —El órgano pedicurista, el pellizo del peligro y la gama del oso, cada circuoide, hasta la dentrifica, y las oromelasas, para cada progenie, un embarazo partogemetal. Ante cada hijo, un pico de tensión en esputo, y espuma de esperma en los pinceles del osmo...—

Acto cinco

Urano

—La hipotenusa, elevada al cuadrado. El olor pestilente de cada vomito. Lechina, derramada por caos, emulsionando hilos de rayos o centellas, fetos, fetos, embrionarios. Seres cuajados por Urano, emoliente y Probetas, aneptuneano. Coágulos en mielasa, tabla periódica,
con ( Hidrógeno— oxígeno) «Sombras en la retina y sudor escalofríos, materia oscura, veo bebes en luces nominales, » Hediondo el perfume de los hemorrabres, y los pulsometros toman la píldora de la Axioma, — Tuberculosis y muertes por sanguíneos pelambres de hemodialisis, arenesco, aurora de radial y taxonimetro donde caen los corajes de los alquimios mundos de cada carta Astrólogica, y sumerge en colosales servidumbres en luces de Osos polares, y radios en coagulogeneses y centellas, por fuegos de Psicoanalisis, como vientres de fuego y agua, liquidado en suma belleza de Arquímedes...
Pero los Griegos, sonrojaron con belleza primera ante ansiedad torturosa por mis vientres de fuego, Aire y tierra, fundida por ombalos y colones con apestosos azurcones, bombeando con armas de Hemisferio Geminia y por donde, Aries, mece su prostata.

Acto seis

Maullan los gatos, en Plaugus

— Lágrimas, lágrimas de León—
Hay un sollozo, un cimbalo, un hecho cuadrangular. — es ansioso, es verdadero, es el molusco de las formas, — cuál sentimiento de belleza, cuál infinito mundo del tiempo y la profundidad. «El amor rige sobre la constelación de Saturno»... El mundo es susodicho por la infinita cualidad, del escenario hiperbulo, y es coavico— molecular. «Soles y estrellas, cuál escenario de Isolda»... «Cuál orgasmo de soles, sulfilando el equinoccio del tiempo y los mundillos del soplo fantasmal, hasta el hipotálamo. — Cuál soledad fructífera,( no hay un tiempo después de los niños asustados, mi ciencia descree de los gemelos y los bellísimos órganos de la pasteurizacion, porque Oninfeta, el simple hecho del triángulo hace que los bordes instersticiales de obstetricia, coagulen en su venula mi chorro epitelial de sangre en parto considerado y un embrión que no es sólo hijo de Quini, sino, de la bóveda epitelial de los acabados en los etéres. Genes, —¡Oh! — embrión. Ludovarico, mesoovarico, ovovivíparo y genital como un ser parasitario, viviendo de plasmas, de retinas, de mis óvulos, de plastilinas, de azúcares, glicemia, hemolitico, raquítico, pusilánime, como un ajedrez, como un puzzle, yo hago, música con los timbres de los oídos de los muertos y vivos...Palmar cutaneo, separador corto, flexor corto, aproximador. Escotadura radial, cresta supracondilea lateral. Olecranon, cabeza, cuello, escotadura troclear, apofisis estiloides del radio, músculo trapecio, bolsa Rathke, suelo y orofaringue, evaginación. O puede ser basofilas o cromofobas, ¡Oh! — lactropas, láctea, corticotropas, tireotropas, vasopresina, oxitocina, acidofilas. Ovario, estrógeno o puede ser endodermo, tiroodrena, tirolinguofacial, Acth, Gh, Tsh, glucagon, médula...y yo, embrional...
— Arteria Aorta, coronarias, hepática= gastroduedonal, espermatica/utero/ ovarica. Mesenterica inferior. — Gastroilegenesis, o ovalogeneliutiloipiliolni, o masogenerdis, o liliumoiligenitilialniliopiol, o árbol de enclenque mayúsculo, o mayúsculas con Rb y Rh, o azul cielo como Radomiro...
Tuberculo supraglenoideo, escapula, tuberculo infraglonoideo, vaina tendinosa intertubertucular, cápsula de la articulación acromioclavicular. Vena basílica, red venosa dorsal de la mano. Músculos, flexor de la mano... Y yo, órbita de Urano.

Epílogo

—¡Oh, bocas interminables!
El ciclo del rezo, para la protectora de los animales.
Todos los inocentes
Perros y gatos
Cualquier amigo, me llevará a una buena muerte.
Sólo descansar en los campos de Argorea, en Guil, como la belleza de los tiempos...
Solo, agonizar y reir con mi vida, al final...
Ave Silvestrus

¡Renace!
—¡No ha muerto, Oh, Oh!
Escucha su sonido, es la vocal de los mundos
Y su mente es alegría...
Alegría y chispa divina...
Todo en ella, vive o muere.
Hija de Argorea, entra silenciosa al cosmos
Porqué su dulzura hace que las enfermedades se adormezcan.
Y canta! Canta! Canta tan alto!
—¡Todos la oyen! — Todos se unen.
Y nadie puede matar su bemol
¡Eterna!
¡Eterna!
Vive
Vive
Jamás muere
Porque su vida es la visión del tiempo
Y concebida por la gracia, ella hace que todo viva!
No muere
No muere
Porque vive en Fantasía
Y su ternura hace que lo puro sea tradicional.
No hay nada
Ni un tropiezo
Nacida en Cáncer
En Junio
Hace que los más humildes se abatan con ella
Dulce y hermosa
Porque ha nacido de la tierra
La tierra le dio la vida
¡Oh, oh, oh!
—todos/todos/abatidos/ ella hace que las trompetas de la gracia divina se conmuevan ante sus lágrimas.
—Alegría/ terrible encanto/ Oh, Silvestre, eres inmortal.
Nada ni nadie/ puede detener a la reina de Fantasía.
Vengan y beban
Hijos mios
Soy tan fecunda
Vivo y me hago con la razón de las mentes y la injusticia no hallará paz nunca conmigo....
Soy Silvestre
Señora de fantasía
Veo y creo, en mi gran mentalidad...
Vuela y nace
Sólo una planta
Renacida en Invernalia...
(Cambio

El ser permanece inestable, cambiante como un rumbo, hacía una senda diferente.
¿Qué definimos con el hecho del «cambio»?
¿Es el hecho la posteridad de la ultranza? Semejante o no, el hecho de renacer, es cónclave máximo y expresivo de la característica humana, del (pensamiento— razón — ser)... Cuando cambiamos, el heteronimo de la profundidad del yo, más superlativo, cambia en múltiples formas, hasta qué quede la imagen o « Relativo compuesto, de la libre acción del hombre primitivo, generando su paciente forma translucida de ser un imperativo real de una confirmación de su mente hasta su contemplación divina y alter— ego— idolatra, de su «imagie». El Ser, por tratarse de un organismo frágil como humano, transfiere su superlaxia hasta que crea su orogenia, en un principio matemático e irreal como real, para demostrar su talante falaz de reconocimiento parcial acerca de su coyuntura y naturaleza peyorativa. Como transfigenie, su libre pensar, eleva su razón más tarde o más temprano que su interaccion Psicosocial, albergando en su maxima extensión, una faceta multitotal de caras que germinan en diferentes hechos a través de la sola visión de un fenómeno caracterizado por demostrar una ágil unción de su Parmenide)...

—Quedate junto a mi, cerca de la luna.
Tú y yo.—
Tan sólo para llorar otra vez.
Hay tantas vidas
Y yo, acabe con mi inocencia
En tiempos antiguos
Tu y yo
¿Sabes lo que se siente morir?
Demasiada vida, señor
Demasiada vida
Inocencia...
Purificado de adentro hacia afuera
Destrozada
Aniquilada
Pero viva
En el suelo
Silvestre detiene la mano del agresor
Ya no puede golpear
Ni ejercer violencia
Estoy sangrando
Es mi inocencia perdida...
Está canción
Vuela
Elevate
Elevate
Vuela
Elevate...
Escucha la canción
Danza
Quién baila no estará perdido jamás.
Merodea en tu cosmos
Baila y danza
Baila y gira
Sin aliento
Sin voz
Sólo gira
Eres inmortal
No hay nadie
Excepto tú...
Oye
Empieza el sonido
¿Eres tú el qué baila, amigo?
¿Sabes? Te he estado buscando durante mucho tiempo
Largo tiempo
Amigo
¿Me oirás?
Danza
Lentamente
Tan puro y hermoso
Eres perfecto como eres
Con tus errores y fallas
Baila
¿Quién puede detenerte?
El corazón
El alma
Tu mente
Todo es uno
En este bolero
Nada
Sólo tu camino hacia las estrellas
Guialas...
El elegido eres tú...
Baila
Baila
Baila
¿Adonde vas?
Quieres un amigo?
Yo te llevaré hacía el paraíso de los redimidos
Hacía el cielo
Acompáñame
Vamos
Vamos
Vamos
Vamos
Sé libre
Eres uno
Uno con todos y nosotros
Uno con todos
Uno eternamente
Solo uno, eres tú...
Oh, oh, oh...
Oh, oh, oh...
Oh, oh, oh...
Liberate
No hay cadenas, ni credos, sólo tú...
¿Crees en mi, en una planta Silvestre?
Na, na, na
Oh, oh, oh...
Baila
Gira
Baila
Eres libre
Desde ahora y para siempre eres libre....
No hay caminos, sólo el tuyo...
Así que tranquilo... Yo, te guió...
Todo estara bien
Te lo prometo
Sé libre
Tan libre
Como yo...
Oh, Oh, Oh
Vence
Sé vencedor
Naciste para ganar
No lo sabias
Pero desde que abriste los ojos.
Eras especial
Eras único
E irrepetible
Danza, danza, gira, gira.... Por siempre.
Nada te detendrá jamas
Eres todo con el universo
Eres todo
¡Todo!
Baila amigo
Baila
Y cuidate...
Sólo baila
Baila
Baila
Baila
Ah, ah, ah...
Sólo tú...
Aquí eres inmortal
Nada puede vencerte
Gira
Gira
Gira
Gira
Gira
Hasta siempre
Baila
Eres un Dios
E infinito
Feliz como ninguno
Inmortal
Inmortal
Inmortal
Inmortal...
Baila....
Hay acaso algo más hermoso que tu baile en el cielo azul?
Nada
Nada
Nada
Sólo tú...
Sólo tú
Para mi
Sólo existes tú
No quiero nada
Sólo tu felicidad
Amigo...
Dame la mano
¡Eres un fenix!
Yo siento el fuego
En mi
Nace
Yo te doy Luz
Nace de nuevo
Nada
Nada es incansable
Todo es posible
Si crees en ti, Inmortal
Crece
Puja
Secreta
Haz hijos con tu mente
Haz una música nueva
Creala
Hazla!
Sólo tú
Eres el elegido
Ansioso
Eres el preferido

Sólo tú
Sólo tú
Sólo tú....
Tú...
Goreano
Tú, siempre, Goreano
Infinito hasta el monosílabo de cada palabra
Lejos, navegando en los espacios siderales, una mancuerna de oro puro descansa en una colmena de perlas diáfanas.
¡Oh, musa!
En las colchas marinas repiqueteando océanos bibliograficos
Los ecsemas de las parturientas humectan la boca de los insípidos y los inteligentes hombres del árbol cuecen frente a una ventana su crocante muda de pan, holgazaeando bajó los pinceles de cada mies, contando en bolsas de tomates rojos millones de arenas rojizas cuál esfera de estatuas
Cuál famoso ligue de trompetas en la sinfonía de la alegría.
¡Sollozando cada eslabón al chocar las pisadas de los mundos enternecidos por las frases ahumentando el goteo en cada ojo, oh, puro esplendor!— Es tu manzana, roja y brillante, de treinta años en un árbol Argoreano y Silvestre descansa con él, siempre soñando con la imaginación...

(Ka+ Na+ P— materia oscura en la médula osea)....

Acto Siete
Illipaliouliou, me hizo ver la materia gris de espindula, — y, metástasis, sangria me hizo mear hacía la protuberancia de «Eolos»... Cuando Faliuyio, dominó el alquimico Ser a través de Junin, y la metafísica fundo la primigenia del oval embrión, fecundando, ovulogeniendo, ovalicionando, creando masa total en míster de Infalituy, nació una estrella mística, crecida por mareas azules, trombones y pedazos de azur me cayeron encima y un gran eclipse Zyrcon, auspicionó mi dobladillo con oro y metal, haciendo que el SuperYo (se hiciera sangre y pulmón)... Y con arena de Eneasis, mi oasis se colmo con eclipses de Luna y Sol, —«Secrecionando pandemias y lechos con azul vida, haciendo que mi gioblastoma, diera pujanza a mi hijo alrededor de ala órbita de Saturno y Urano y caos en cometas de Centuriones ovales como Argorea... ¡En Aleoiuyio! Surgió Silvestre con Salvia, y sus ojos como Supernovas, deambulando por la milla de la luna verde y el mar de Kalevala...»
—(Guonide; es la apostrofe, sulfilando caos en masa, hasta físicos nucleotidos, — parietal— surco —naso— premial. Y el hipogloso, por hipoglucemia, naciendo en sagital mundo)...
... Pero las corrientes en Ecturalia, sacuden al invertebrado, y las ansiedades mentales, hacen al corazón y a la mente, latir...
— Y, cuál, si fuera, un cansancio mental y corporal, — Silvestre, solloza, si hay, un óvalo, hay circuoide, — pero, elemental, — el reino cansino, se vuelve, potencia y crece.
«Ecturalia, mujer de la tarde y el amanecer, cuenta junto con Eos, la maravilla de los días y se dice qué cuando despierta, ella canta.»
—Para qué ningún poeta se sienta solitario ni perdido. — «Ella, es la estrella madre»...
Canto a mi misma (Song of myself)

Una pequeña niña está temblando de miedo
Su hiperventilación se llena hasta el pulmón
Que sangra ante cada quejido.
Su corazón sólo desea cesar
Aumentando el calor del baño
Una ardilla azul está cantando.

«Mi vida en silencio, mi paz en oración. »

Soy una maga en tiempos oscuros
Meciendo mi vida
Adonde sea que vaya, mi música será dolorosa.
Sólo yo, muriendo para nacer.
Sólo mis letras en está sangre
Purificando mis oídos
No importa lo que vea
¿Tú, crees en el amor?
¿Acaso ves a una doncella cuerda en un mundo de locos?
(Yo, veo a Sarah con metafísica.)
Todo en mi, está mintiendo
Todo alrededor es locura
Masogenesis y ovulegeneidasa, para los nacidos en abril.
Pero yo soy Junio...
(Apenas, una razón, si me dieras una oportunidad.) ¿No valdría la pena morir por ti?
Estoy cantando en este teatro
En está pasión en la ópera
Yo misma soy un teatro
Me hago música y mística
¿Sabes adonde ir cuando todo este triste?
¿Cual es el color de la esfera que veo en mi péndulo?
Si llevó una cruz, una tinta está muerta sin voz, sin oidos, sin vida qué rescatar...
Aún sigo viendo a todos esos muertos viviendo una vida de mentiras... Fingiendo vivir, cuando están muertos...
Sólo tocó un Re menor.
Mientras, mi pulmón sigue ardiente.
Mis ojos vencen lo oscuro.
(Yo te veo a ti, feliz)
¿Mamá sabes de que color son las fresas?
— No hay nada excepto mi intención de sobrevivir en mi vida, y mientras voy olvidando mi epitafio, mi huerta de flores es mi Silvestre flor en mi tumba. —
Tú, eres sangre en mis venas. Canción en mis aurículas. Estoy viendo como aguantar otra embestida...
Soy una gacela hecha pedazos.
A veces me miró y no me reconozco.
El espejo siempre miente...
¿Quién me mató hace tanto?
Ya ni lo recuerdo
Pero mis pesadillas siguen latentes...
No soy una firma con una razón
Pero si una fiebre con síntomas de viva.
Podría ser una muchacha virgen con ilusión
Papá ¿Tú, ves mi dolor? Siempre fingiendo que no pasa nada... Nunca un consejo.
¿En quién he de confiar? —Sólo en Dios, me refugió.—
Estoy más pálida que un muerto...
Como una válvula rara, sonando y mis sueños son clásica con violín.
La niña está jugando con sus penas...

Silvestre, azul. La estrella Siria.

«En Alpha, —Canis Mayor—, "el lobo", junto a las almas de los enclenques que pasarán junto a los nacidos, «Silvestre», surge, como Canino, lobo, en los tiempos del Sur. »...
...Se cuenta que ella es la lechuza blanca, dicen los Druidas y los Chamanes, que asciende a un punto luminoso, donde «Silvestre, Siria, » nace en medio del caos...
—y, — como es de Cáncer, bajó, Juno, su natalicio, se cuenta que es hija del Sol. Y el ojo de Horus, vive en su apostrofe. «Cuál esplendida, rozagante y brillante, Siria— Silvestre, brilla como el viento del sur, dando aire, tono en Brisa, circulando ovalmente, en los siglos de Babilonia y en el calendario Egipcio. — (Siria), estrella del Sur, asciende hacía •Cangry•. » ... Y, los Celtas, queman hojas en su belleza y la adoran en los tiempos de la cosecha, mientras, Siria, perpendicular, ilumina como ninguna luz en el cielo. «Dándole paso, a las almas de los inmortales, en su rostro lunar...»
El ángel Silvestre
—Nació un día,
en un mundo oscuro.—
(Trajo luz, en su parto. )
Mientras, nacian más bebés. Ella, sonreía en su cama de oro, viviendo en su orogenesis, subía cuál peldaño, en la intensidad...
Subía hacía el mundo, ocurría que conocía todas las formas y no moría. Tuvo que hacerse ángel como ninguno para alumbrar al universo. Como una fiebre, nacer en su briogenesis, nacer en su belleza hasta el morir por su luz...
Como crear cura con sus plantas vegetales.
A quién toqué sanaré...
Algo similar a una mística
Naciendo de un parto
Meciendo óvulos con mi trillar
Con fiebre en mi cuerpo
No te dejaré jamás sólo...
Prolacos en mi pecho, yo, lacto por los niños abandonados. Soy madre de naciones. Todos son mis hijos. A todos, los llevo como una bandera en mi corazón del Sur...
Tú, eres bendito. Sólo por haber conocido el dolor.
Y por haberme visto u oído, salvado.
Nunca una teoría semejante.
Son letras...
De un extraño.
Llevó en mi, los sueños del mundo y el tuyo.
Llevó conmigo tus dolores y los hago salvos.
Cargó conmigo tu espina y la hago menos dolorosa.
Nunca volverás a sufrir.
No, mientras exista...
No, mientras mi poesía se muestre.
Una planta Silvestre qué salva es quién debe ser la que te da la gracia.
Gracia de ser espada de la inmortalidad
Eterna e incorrompible.
Ojos de León. Vista de Buey. Cabellos de medusa. Y ciego el punto más lejano a Orión. Piensa, vive y crea, los ojos de Athena, vivos en ti, a través del mundo (Prolacos)...
Estoy muriendo para que tú, te salves...
Sólo metafísica y nada más...
Silvestre.
¡Argorea, planeta Azul!
Argorea querida
¡Oh, oh, oh!
Silvestre
Y Argorea por siempre
Girando
Oh...
Ph
Oh...