Inextenguiblemente...

INEXTENGUIBLEMENTE…

Presurosamente se acaba el aire de la existencia,
como el tiempo que transporta con la velocidad de la luz,
imágenes vividas,
sensibles luminarias de lunas románticas,
cargadas de mares de sol,
y océanos tormentosos de lunas apagadas.

Pero así es...

Una conjunción de bellezas regocijantes,
don más preciado surgido de nuestro semen,
que existirán ante tu ausencia física,
perdurando tu nombre en el tiempo,
protegiendo a través de tu espíritu,
con todo tu sensibilidad desde el más allá.

Un tiempo de existencia.
Otro de ausencia eterna.

Donde solo flotaras por los espacios,
como un espíritu,
por los siderales mares del infinito,
a la diestra del señor Dios Padre,
redimiendo las malas vividas,
y confortando las buenas,
en pos de tus amados.

Y allí...

En el medio de volcanes siderales
de lo inimaginable para tu ser humano,
por siempre perpetuamente,
te amare como te amé,
en mi vida terrenal,
inextinguiblemente,
carucha sensible,
donde las alondras,
respiran los poros de tu dulzura,
mi dulce bebe.

Porque tu amor..
Mi amor...

Nunca tendrá tiempos y espacios,
en la gimiente de mi corazón…

Reservados todos los derechos Santiago Oreggia©