CUESTA ABAJO
poema de Santiago Andrés
A veces te adueñas de mí, de mis miedos
A veces lloro sin querer, a veces te espero
Dulce fémina bella y cruel
Tan perversa, tan nociva como la hiel
No quiero, pero necesito pensarte
No quiero, si, ya no quiero
Pronto saldrás de mi mente, eso espero
Perdón por no poder olvidarte
Perdón por no empezar a odiarte
Aunque pensándolo bien
¿Por qué pedir perdón?
Amar y querer no es delito, no es pecado
Es lo que buscamos, es lo que soñamos.