Tanta vida

A diario bebo de esta copa
que en cada aurora se encuentra rebalsada:
tanta existencia al borde de las horas,
tanta vida desbordada, tanta vida, tanta vida...

Y los pies que entroncan el camino,
la mano que duda
en cada picaporte.
Vienen y van puertas y ventanas,
rostros aún cuajados por el sueño,
calles que se postran ante mí
esperando la hondura de mi paso.

Tanta vida.

Hay quien esperará sonrisas
y quien aguarda a la orilla de un altar
la respuesta a su llanto.
Todo un nuevo comienzo
al borde de la boca, en cada lágrima,
en cada dedo, en cada entraña conmovida,
en cada ignorancia voluntaria.

Tanta vida.

Todo encuentro es un salir.
Éxodo desde uno mismo.
Todo es un hacia,
un ir, un extenderse,
un expandirse.
Así damos salida a tanta vida,
tanta vida.