Lo cotidiano.

Lo cotidiano, introspección.

Deja que las colinas sean colinas así como los mares,son mares. Sin importar que la turba le cambie el nombre y le invente apellido.
Que no te confundan las multitudes, ni te impacten los largos discursos de gente sin alma. Respira, vive y sueña. Eres un montón de esas cosas que amas.
Tu vida tiene su propio curso, lleno de contenido tras contenidos.
Deja que fluya de ti, eso para lo cual has venido, aferrado a tus convicciones, quedate en silencio y observa como crecen las hierbas del mismo modo que vos vas creciendo y aprendiendo con los años que le añaden propósito a tus días.