Pleamar.

Atraídos por el horizonte azul
Mares lejanos sin descubrir
Maravillas y tesoros de baul
Epopeyas aún por describir.

Mártires de juego arriesgado
Sosegada vida aborrecen
Crespan olas con tenaz arado
Gloria sólo algunos merecen

Sedientos de oro tal vez
Muerden a muerte anzuelo
Se mueve espada sin timidez
En nuevo sendero y suelo.

Mágicas montañas de verdor
Impenetrable pero vivo
Los recibe a su estribor
Joven sin ser captivo.

Siega sol radiante miradas
Sofocante calor tortura
Han visto sirenas y adas
En histórica aventura.

De pronto resuena trueno
Amarillo metal a roja ría
Plomizo cielo, nada bueno
Disparos a sangre fría.

Silbido de balas punzantes
Ladridos de perros
Chozas, bohíos humeantes
Ley de mordaza y hierro.

Para hombres y mujeres
De aquella raza nueva
De raras costumbres
Y deidades de cueva.

Qué esconde el porvenir?
De mestizaje violento
puede algo nacer y vivir?
(Sin morir en intento)