Al Maestro Joel

Al Maestro Joel

Gran persona
Envidiable ser humano
Que lleva la poesía a flor de piel
Escrita en su corazón,
Por la excelencia de su mano,
De inmensa sabiduría
Y de tamaña humildad
Recibido de poeta por la vida
Por sus experiencia vividas
Escribe sus poemas con la pluma recibida
En la facultada de la vida
Que en su alma lleva cautiva,
Y aun cuando descansa
La vieja pluma con su semblanza
En su memoria sigue escribiendo
Con tintas de libertad
Y blasones de esperanzas.

Anidó en su mirada
La ternura guarda,
De la inocencia, ya tan lejana
Aquella de la infancia tan preciada,
Pero tiene fuego guardado
En sus humildes ojos trasnochados
Que al mirarte te llegan
Hasta lo más profundo del alma
Como una tarde de abril en calma.
La fragua de la vida
Como herencia le ha dejado
La cicatrices del tiempo
Que ni la poesía ha borrado,
Van quedando como huellas
En su cara de hombre sencillo
Amable, sincero con rasgos de caudillo.
El tiempo le dejo la experiencia
Y le robo la juventud tan querida
Tan poquita, tan corta y apreciada
El tiempo tirano implacable
Le regalo su barba nevada
Para que fuese un abuelo de dulce mirada
Con las manos gastadas y suaves
Son las mismas que empuñando su pluma
Saben levantar su voz
Para gritar las verdades.

Yo no tengo el placer
Y el honor de conocerlo
Y Quizás,……………………..
NO lo conozca jamás
Pero Puedo imaginarlo
Quizás mejor soñarlo
Con su andar pausado
Con sus pies acariciando el suelo
En una negra noche
Bajo un cielo estrellado,
Respetando a la madre tierra
Bendiciendo por igual
Al valle, el Monte y las sierras,
Hombre de palabra inquebrantable,
Si la necesidad lo exige
No le temblara el pulso
Cuando su pluma castigue
Su gesto firme y seguro
Parece parte de su mano,
Al escribir una prosa
O una sentida poesía,
Como Mario Benedetti
Sabe también gritar rebeldía.

Hombre culto, correcto y sabedor
De incalculable experiencia
De las pruebas que la vida
Nos pone a la vuelta de la esquina,
Pensante, equilibrado y conocedor
De los laberintos del camino
Que pueden torcer nuestro destino,
De una inmensa sapiensa
De inagotable paciencia
Su palabra tierna, de raciocinio conmovedor
Apasionado, cauto expresivo y motivador
Amante de la paz
Del silencio y la tranquilidad
Guerrero de la justicia y luchador
Por la ternura, la compresión y el Amor.

Este rustico aprendiz de poeta
Con sus defectos y erros a cuestas
Intenta desde la distancia
Enviarle un abrazo hecho poesía
Con perfume de amistad
Y admiración en su fragancia,
Quiero en esta ocasión
Brindarle desde mi corazón
Mi más sincera admiración,
Volcando en este verso mi pasión,
Las brasas encendidas de nuestro fogón
Alumbraran por siempre esta amistad
Estrella encendidas en la oscuridad
Que alumbraran desde lo alto del camino
Por siempre nuestro destinos,
Valla mi homenaje rustico pero sentido
Con respeto y gran admiración
Con cariño y devoción
Para el Maestro Joel
Que lleva la poesía a flor de piel
Desde la distancia poetas amigos
Pido un aplauso sentido
Para el Maestro Joel
Cariñosamente con eterno cariño
Como quisiera volverme niño
Para besarlo en la frente
Y decirle gracias Maestro
Por todo lo que nos has enseñado.

Mario Anónimo