EL AIRE TOMA LA PALABRA

Vos te comés el asado
y a mi me arrojás el humo.
Vos levantás rascacielos
y a mi me cortás la brisa.
Vos bajás las persianas
y me partís al medio.
Vos ventilás tus motores
y a mi me soplás calores.

Me subiré a un barrilete
y me marcharé de aquí
hasta arribar a un molino de viento
en tierra marroquí,
y en las alas de una alondra
me dedicaré a planear
hasta trasbordar en una mágica alfombra
que aterrice en el Gran Bazar.

Vos me apuntaste un tiro
y me descerrajaste,
me empleaste en combustiones
y me contaminaste.
Vos te refrigeraste
y a mi me recalentaste.
Vos te tiraste un pedo
y a mi me dejáste el CO2.

Me embolsaré en un paracaídas
y ahí me ocultaré.
Reapareceré apagando velitas
en un cumple de 3.
Impulsaré voceríos
a kilómetros más allá.
Y los pulmones embanderarán canciones
de corte pluridireccional.

Vos echáis más leña al fuego
y a mi me serrucháis el piso
Vos desertificáis la tierra
y a mi me levantáis polvaredas
Vos incineráis basuras
y a mi me esparcís cenizas
Vos pulverizáis con aerosoles
y a mi me esquilmás el ozono
Vos diseñais tus caños de escape
y a mi me arrojáis partículas
Vos encendéis lamparitas
y a mi me dejáis afuera
Vos te fumáis tu cigarro
y a mi me embebéis en nicotina
Vos arrancáis tus turbinas
y a mi me espantáis los pájaros
Vos amontonáis objetos
y a mi me tornáis irrespirable

Metamorfosearé en mariposa
y volaré hacia la región más transparente;
y pasaré sobre un volcán
esquivando su lava ardiente.
Amaneceré copulando con la bruma
a la orilla del mar
y anocheceré entre las estrellas
viéndonos pasar.