VIVIR

VIVIR

Las horas que madrugan,
han venido a charlar conmigo,
en esta noche insomne.
Lejos suena el canto de un pájaro perdido.
El agua de una fuente cercana,
cuenta días, horas, y minutos,
dejándose llevar mansamente,
hacia la alcantarilla rumbo al mar.
Se apagan los neones,
los anuncios corren a dormir,
en los delgado hilos de sus lámparas.
Amanece,
el aire cruza mi cara como un extranjero,
de un lado a otro, sin concierto,
sin mapa que le guíe.
Quiere salir el sol,
empuja a las nubes.
Entorno las pestañas,
la luz de su belleza quema mis ojos.
No es lluvia, lloro mi pequeñez.
Las horas me sonríen,
marchan rápidas,
empujándome hacia la cama.
No estas, yo no sé si estoy.
Me ducho,
dejo que el agua llore conmigo.
Visto mi cuerpo con el día algo arrugado,
me calzo los zapatos de vivir,
y a trompicones,
casi sin percatarme, vivo.

mabel escribano
d.r.
imagen: wordpress

Comentarios & Opiniones

ASILVAR

Bellos matices en tu escribir poetisa
"Las horas que madrugan,
han venido a charlar conmigo,
en esta noche insomne."
"Me ducho,
dejo que el agua llore conmigo.
Visto mi cuerpo con el día algo arrugado,
me calzo los zapatos de vivir" gracias

Critica: 
mabel escribano

ASILVAR, Muchas gracias por su amable lectura y su comentario, es muy amable.

Critica: