LA SINRAZÓN DE LA RAZÓN

LA SINRAZÓN DE LA RAZÓN
Te quiero desde el lugar
en el que me soy ajena.
Desde el punto donde olvido
lo que me propuse alguna vez,
hace tanto que ya ni me acuerdo.
Te quiero desde la piel,
desde mis uñas,
desde la raíz de mis canas,
desde la humedad de mi boca,
desde mis sentidos más íntimos,
desde aquello que llaman sentimientos,
y yo no sé expresarlos cuando te miro
y pienso en desnudarte,
para besarte toda,
piel a piel,
recoveco a recoveco.
Te quiero en un poema,
fuera de las letras,
del verso y dentro de mí
contra mí,
presa de mis brazos y aún así, libre.
En una discusión,
que acabará en un beso.
En no comprender nada,
y entenderlo casi todo
cuando me miras.
Te quiero
porque sé que aún queriendo,
ni tú podrás tenerme,
ni yo, tenerte puedo.
mabel escribano
d.r.
imagen: google