CAMINO SIN NOMBRE

CAMINOS SIN NOMBRE
Que la espina fue siempre espina,
y no contenta con herir,
se hizo garra de felino.
Y alzó la vista al monte.
y me tomó por una piedra del suelo,
clavándome la zarpa hasta el alma.
Que la zarza fue siempre zarza,
y encandiladas mis manos con sus rosas,
me hirieron los brazos hasta más allá,
de donde la piel sangra.
Mi sangre agua para sus púas secas,
tintura para sus frutos que no gocé,
ni por la senda anduve sin pena,
ni se me abrió vereda sin rastrojo.
Que no tuve fuente con agua,
que la castigó sin salir el caño,
por no compartirla conmigo.
Y fui sed,
lamento sin palabras,
sangre porque la tuve,
aunque fui dejándola mientras,
cantaba por no llorar,
la canción de mi propio olvido.
"Que soy lo que no soy,
camino pobre sin caminantes,
sin señales ni pueblos que me adornen.
Abandono soy,
ni nombre tengo,
ruta de olvido sin que me anden"
Y la rama, que no dio rosa,
fue siempre espina y siguió siéndolo.
mabel escribano
d.r.
Imagen: google