Me hace falta el Sol

Y pensar que no quería...

Silencio,
luz tenue de sol agonizante,
brisa delicada de cierta caricia.

Quietud...

Concierto de grillos y agujas de reloj.

Soberbias y elegantes estrellas
patinando son sutil movimiento
en una inmensidad que se traga el orgullo al rededor.

Y mi vida, Tú y yo
sentados sobre la gravedad.

Y pensar que no quería...

Ahí estabas mi vida,
herida con profundidad abismal.
Disimuladamente lastimada.

Y no lo pensé...

¡Me matas!
Ahora lo sé...
¡Me matas!
¡Jamás lo pensé!

Mis párpados represas
aun contienen el desborde de sentimientos
Porque estoy profundamente herido.
Sí quiero.
No puedo.
Si vieras mi herida tú..., es tan grande.

Astro muerto ya,
firmamento sin gobierno certero.
¡Qué caos de estrellas!
Igual que mi alma.

Mi vida herida,
yo muriendo
y Tú abrazando.

No quiero más luna no,
ya he tenido suficiente.
Esta vez si no es mucho pedir,
regálame lágrimas, sanación y sol.
Aunque de veras te digo,
ahora y siempre
solo me bastaría el Sol.

01/01/2016.