El Baile de la Muerte en el Castillo Antiguo

Oscura y siniestra, la noche se cierne
Y la muerte, implacable, se acerca sin tregua
Atraviesa la bruma con paso firme y grave
Dejando tras de sí un aura de miedo y sombras.

La luna, impávida, ilumina el camino
De aquellos que vagan en busca de una salida
Pero la oscuridad acecha en cada esquina
Y el terror, como una plaga, se extiende sin pausa.

El viento sopla frío y aterrador
Llevando consigo el eco de lamentos y gemidos
De almas perdidas y condenadas a la eternidad
Que deambulan por el mundo en busca de la paz.

La vida misma se retuerce en este abismo
Donde la muerte es el fin inevitable y cercano
Y la esperanza se desvanece como una llama
Que se extingue lentamente en la oscuridad.

Así es la noche en el castillo antiguo
Donde las sombras son más oscuras y profundas
Y los espíritus se mueven con soltura y facilidad
En un baile macabro de muerte y misterio.

¡Oh noche terrorífica, cuán siniestra eres!
Pero en tu oscuridad también hay belleza
Como el contraste entre el cielo y la tierra
O el silencio que precede al canto del alba.

Y así, como un sueño del que no se puede despertar
La vida fluye en un eterno ir y venir
De luces y sombras, de risas y lágrimas
Que se mezclan en un baile sin fin.