SUTIL SUSTITUTO

Extraño tu voz...
Extraño tenerte.
Y la pregunta que taladra mi mente es:
Cómo hacés?
Y te cuento que te envidio!
Envidio tu forma de afrontar el caos.

Quizás sea sólo mía esta sensación de pérdida tan intensa provocada por tu ausencia.
Este torbellino, esta angustia,
El deseo despreciado.

Presunto amor, desamorado, que se te convierte en culpa... Quizás sea sólo un excusa para mantener distancia.
O tal vez hay alguien en tu vida que te da micro dosis de mi? Alguien que te lleva ecos de mi voz y de mis gestos... Alguien... Completamente inofensivo para tu realidad prendida con alfileres... Alguien que entró con mi permiso y ... Bueno, cosas que pasan...

No sé...
A estas alturas del cuento, ya no estoy queriendo saber más de nada. Prefiero seguir fingiendo que nada importa y dejarte. Verte alejarte envuelto en recuerdos de besos robados y amores ahogados.
Esperar que el señor del olvido no tarde, porque me duele tu ausencia... Mientras se pasan los años y se envejecen los cuerpos y mi corazón, intacto, sigue esperando.... Esperando.