III
poema de kazuk
Era noche matutina y oscura,
las aves se escondian del sonido,
ese maldito que sesgó mi sino,
ese que presagió una cama dura.
Asi estaba yo... asi mi amargura
pues sonando ese sonido salido
de los fuegos del infierno encendido
sucumbí ante ti, mi sutil locura.
Aún pienso en la sombra de lo que eras.
Sigo sintiendo el silbar de tu escarcha,
seismo de visiones y porfía.
Sabe Dios que despues serví a velas
pero ese tañido jamás se marcha,
me susurra, siempre como ese dia.
Comentarios & Opiniones
Hermosos escritos, Kazuk. Un gusto leer y apreciar tan buenas letras. Saludos.
Un gusto es seguir sus escritos. Reciba mis saludos y amistad.
Bellos versos, tristeza y melancolía me sugieren. Saludos.
Asi estaba yo... asi mi amargura
pues sonando ese sonido salido
de los fuegos del infierno encendido
sucumbí ante ti, mi sutil locura.
hermoso versar poeta, un gusto leerte saludos