Mujer y una sofa roja

Karam.t.f.nimri(Spanish&English).

Mujer y una sofa roja.

Tenía la cara distinta,
Mitad de perfil.
Hacia trabajos sin darse cuenta.
Brillando vasos que ya brillan.
Tan limpios como espejos.
Solo era pretexto.
Forma de evitar miradas.
Que no estemos cara a cara.

Me di cuenta en seguida.
Que lleva dentro un drama.
Que lleva noticias.
Asuntos de importancia.
Viví las escenas antes.
Conozco los límites.
Siento la serenidad.
Siento hasta inmune.
En cierto modo indiferente.
Yo siempre quise estar equivocado.

Note un nerviosismo extraordinario.
Cara exprimida incolora.
Los labios pegados y mordiendo.
Frotaba los vasos con algodón fino.
Extraño que lo haga.
¿Algodón para la cara?
Se usa para des maquillaje y ojos.
Limpieza e higiene.
Me quede quieto y silencioso.
Dos grifo abierto sin sentido.

Todavía sin fuerza de decir nada.
Así pensé que le falta todavía la fuerza.
Una decisión y entrar en el tema.
No sucedió así.
Siguió pretendiendo ocupada.
Estaba concentrada como hierro duro.
Yo en aquella esquina sorprendido.
Una distancia de metros.
Distancia de notar y sentir todo.
Estaba ella escuchando noticias de radio.
Algo fuera de costumbre
¿Cómo se fuese interesada?
¿Cómo realmente involucrada?
¿Cómo se le importara el mundo un poco?

Opte por sentar un poco.
En una esquina en un sofá rojo.
Sofá que compre usado.
Tuvo color que me trajo.
Tuvo espacio
Sofá que no encaja en una cocina.
Un contraste de color y tono.
No encaja con el color frio de mármol.
Pero era mi esquina.
Era el sofá del hombre.
Siempre siento y noto cosas.
Siento más entrañable con el sofá rojo.
Cómodo y más abierto.
Más extendido.
Hasta con ganas de más dialogo.
Cómodo y más abierto
Hasta más capaz de escuchar a otros.
Les aguanto más.
Tolero más insensateces.
Las congruencias que hay de sobra.
Cosas que la gente considera importante.
Hasta cuando están convencidos.
Fanáticos con los conceptos.
Es una pena que haya distancia.
Que haya escalas.
Siento cómodo sentado en sofá rojo.
Ya tengo el vaso de agua cerca.
Agua fría y fresca.
Tengo que llevar algo en la mano.
Lo que sea hasta un vaso.

Quedo el silencio dominando.
Ella nerviosa en una esquina.
Limpiando vasos que brillan.
Yo sentado en un sofá cómodo.
No quise entremeter.
Tuve escenas parecidas.
Tuve la infortuna de tener tantas.
Era raro pero sucedieron.

Marcho después de poco.
Casi corriendo.
Yo perplejo.
Subía con prisa.
La escalera que daba al dormitorio.
Allá en el segundo piso.
Oye sus pesadas rápidas.
Escalera de madera.
Las pesadas hacen eco.
Seguro que tiene todo decidido.
Ya hasta planeado.

Quede en silencio.
¿Ya no hay ruidos?
¿Ya no hay pesadas?
¿Quizá está esperando a que suba?
¿Quizá esperando que yo pregunto algo?
Quede sin embargo plasmado en el sofá rojo.
Quede más tranquilo.
Hasta pensando en otra cosa.
Planes de conseguir un crédito.
Una casa de segunda fila.
Una zona costera.
¿No era normal mi postura?

Oye ruido de puerta general cerrando.
Ya seguro habrá ido.
Habrá dejado una nota.
Una carta explicando todo.
¿Quizá no ha dejado nada?

24/9/2013
Karam.
Mujer y un sofá rojo.
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