Maldito tiempo

Tiempo, maldito tiempo que hiciste de nosotros cuanto te dio la gana; ¡carajo! si tan solo nos hubiéramos puesto tantito de acuerdo, nos dejaste ser el uno para el otro y hoy no somos ni jamás seremos lastimosamente nada. Maldito tiempo que nos pusiste a ella y a mí para otro momento, para otras personas, para otros amores, para otras vidas o para una maldita mejor ocasión; nos encontraste demasiado pronto y aun así fue tarde para ponernos juntos y en tiempo cuando tú bien sabías lo imposible que nos resultaba, y todavía se te ocurre la payasada de darme más tiempo para poder extrañarla.

Sin embargo, maldito tiempo te agradezco tanto por dejarnos ser desde siempre el mejor complemento, las personas correctas y los amantes perfectos; pero, también te aborrezco por ponernos muy fuera de tiempo, en caminos partidos y sin duda en la vida equivocada.