Tarde de octubre
Tarde de octubre. Aguacero.
La torrencial lluvia moja
los pliegues de la congoja,
los zapatos y el sombrero.
Tarde de octubre. Febrero
envidia el agua y su ruido
de carnaval repetido
que festejan los jardines.
Y hay un coro de adoquines
cantando en fa sostenido.
La lluvia todo lo empapa:
las ventanas, las penurias.
Ha llovido por centurias
sobre el desgastado mapa.
La acústica lluvia atrapa
por sorpresa al mediodía:
cielo gris con melodía.
El césped del parque juega
mientras la lluvia lo riega
en la tarde acuosa y fría.
Rayos, centellas y truenos
trae la tarde de octubre;
el firmamento se cubre
de nimbos foscos y obscenos.
El agua inunda terrenos
de toda naturaleza.
Hay destellos de belleza
en el mustio panorama.
Suenan en el pentagrama
las notas de la tristeza.
Comentarios & Opiniones
Hermoso poema que nos pinta un paisaje que a muchos nos agrada disfrutar desde nuestra ventana con un café bien caliente. Saludos Joker.
Muy buena poesía la tuya, es un placer leer tus lindas letras. Enhorabuena
Muchas gracias, Juan Carlos y María del Rocío por sus comentarios.
Dios mio!!! Como buena cubana te digo...me has dado en la vena del gusto!!!Que belleza de décimas, que armoniosos, que bien encadenados todos los versos con ese sentido absoluto de un fuerte aguacero inundando todo; hasta los sentimientos, abrazos !!
Gracias, mi querida cubana. Sé que ambos tenemos un gran amor por la décima. Abrazos.