Fornico con la pasión

Me pongo a pensar en mi desgracia y termino ahogándome en un mar de tristeza. Ay hombre, gran penuria la que nubla a mi sistema nervioso central. Inmensa desazón la que se alza en mi cognitivo mundo y lo destruye con granadas de pasión reprimida, de pasión desbordante.
Ay no, no, no, ¿Por qué estoy colmado de irascibilidad? Paulatinamente me estoy enfermando; con un transitar lento y trémulo me voy acercando a aquel abismo penetrante, lúgubre y siniestro… ¿confieso mi deseo mortífero? ¡Quiero fornicar con la pasión! ¡Quiero palpar el vehemente sentimiento de amar!
Ah… sólo queda suspirar, sólo quedan las cenizas de lo que jamás podré besar. Mi suspiro es más grande que mi odio, así pues ¿se alcanzan a imaginar cuán desmedida es esa rabia? Pero sigue siendo poco, muy poco… puesto que hay otra fuerza actuando dentro de mi organismo: La tristeza y la conformidad… cuya esencia cada vez se va arraigando más a mi presencia; quiero que mis ataduras sean tan rigurosas como eslabones de voluntad. Solamente me ocupo de una cosa, no, más bien, soy el espectador de mis propias ruinas y el administrador limitado de mi propia condición.

Comentarios & Opiniones

María del Rocío

Fuerte y sentido,muy buen escrito. Transmites a tu lector! Felicidades

Critica: 
daniel giraldo arroyave

Muchas gracias, poetisa!! :)

Critica: 
Luis

Tiene elocuencia un saludo cordial!

Critica: