Apolo.

poema de Celeste Alma

Junto a la Fuente de Castalia,
dime, Oráculo de Delfos si viene a mi
aquel que atrae mis pasos.
Aquel que me roba el alma.
De aquel que adoro su aroma.
Llevo en mi mano una hoja de laurel
levito hacia su templo
Santuario de lira y danza .
De música y poesía.

Él lleva su arco y flecha,
con su cítara me embriaga.
Yo cargo el trípode sacrifical;
seré su cisne cantor
y su cigarra.

Cuánta armonía en sus pasos.
Es tan hermoso que encanta
con su desnudez de dios.

"Cómo te debo cantar
celebrado como eres
por toda clase de himnos?"

Me arrobarán tus designios,
tu cítara, tu templanza
y tal vez, sin esperanza
por tí morirë de amor.