Hermosos días de Tonterías inconscientes

Como cualquier melancólico,
en un mundo horrible y a la vez hermoso,
destinados a vivir momentos felices,
para recordarlos con un gran llanto
y sonrisa de impotencia.

De no volver a esos meses,
donde el futuro era más claro,
más claro que el agua cristalina,
y la vida simple como el tiempo mismo.

Como cualquier melancólico,
atrapado en un mar de palabras,
no dichas a tiempo,
que apuñalan dejando mil heridas
sin oportunidad de cicatrizar.

Porque la timidez me tenía alejado
de crear nuevas experiencias,
y todo era justificable.
Las palabras y acciones, nulas pasiones,
todo era justificable.

Como cualquier melancólico,
amante de los recuerdos fugaces,
contando sus días que le quedan de vida
mientras recuerda esos bellos y
hermosos días de tonterías inconscientes