Igual existe Dios en el infierno.

Igual existe Dios en el infierno.

Soñé que iba, camino al cementerio.
Caminaba solo, pero sin miedo.
Recordaba las ocasiones que me deseabas, fuera al infierno.
¿Y qué crees? Tus peticiones se cumplieron.

Llegaron por mí, espíritus que vestían de negro.
Igual tenían listo para mí, el mismo atuendo.
Me señalaron un camino, por ahí caminaras, dijeron.
Los seres como tú, deben caminar por ese sendero.

Era un camino que bajaba, al cráter de un volcán ardiendo.
Yo caminaba seguro, con un poco de angustia, pero sereno.
El fuego no quemaba, el fuego era muy ameno.
El fuego abrazaba y limpiaba las manchas de mi cuerpo.

El fuego consumía las impurezas que había en mis adentros.
Al final estaba una puerta, que decía bienvenido en un letrero.
La abrí. ¿y crees? Era la puerta del cielo.
Alguien espera por mí, con los brazos abiertos.

Ven hijo mío, me dijo sonriendo.
Las ropas obscuras al volcán las llevo el viento.
No se la realidad, pero en mis sueños.
Igual existe Dios en el infierno.

Boyo Lucio Martínez.
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