Rugir ancestral

Va careciendo de palabras el aire que me mueve,
no sé si sea bueno o si simplemente me desvanece,
pero sin duda la imaginación todo enverdece, florece,
aún más si es desierto, te da el sueño de florecerlos.

De la observación de lo imposible nace el fusible,
también de ella puede relucir el constante rugir,
los tiempos están cambiando, los siento venir,
es un ancestro el que te está hablando,
sigue escribiendo, estamos divagando.

Somos sólo instantes en un mundo escribano,
en el que constante nos mezclamos, volvamos,
es tiempo de que el rugir del león sin rugir
se haga presente en el escenario,
la gente debe sentir la palabra
aunque la vida nos vaya callando.

Tenemos que conservar un trabajo,
tenemos que ganar un salario,
mantener puesta la máscara,
que ni se nos note la falta.

En la vida hay que ir taladrando
los pensamientos, del cráneo sacarlos,
para evitar toda descaste oseo indiscriminado,
la mimesis siempre ha sido parte del rebaño,
el libre dinamismo se fue con el engaño.

Ella trajo dinamitas como termitas
en el lugar de electricidad infinita,
sucumbimos, culpables y víctimas
de la codicia de quien nos adoctrina,
tan pocos son los que discriminan,
no es nuestra culpa el limitar, imitar.

Acepto la razón, aunque necio me dejo,
entiendo que cada uno elige su corazón,
sólo que a veces olvidamos donde está,
desde cuando el amor te va a maltratar,
te enseña, pero aquí te viene a dañar,
la mediocridad es el diseño de cajas,
que no nos permite mover y hablar,
sentir y fluir, unir y ser feliz,
un autentico divagar, digno de repetir.